Los habitantes de los municipios Iribarren, Palavecino y otros del estado Lara, continúan padeciendo por la falta de un eficiente servicio de transporte colectivo debido al desacuerdo que mantienen la alcaldía de Iribarren y el Sindicato Automotor.
Mientras desde el organismo municipal aseguran que sí se está atendiendo la problemática de los transportistas, estos aseguran que la situación continúa igual con respecto a los insumos necesarios para el mantenimiento de sus unidades, en especial cauchos, baterías, aceites y otros.
Desde el lunes, cuando se dio inicio al llamado paro técnico que dejó a la población sin la mayoría de las unidades afiliadas al sindicato, y pese al asueto que por dos días decretó la gobernación, las personas han encontrado dificultades para llegar a sus centros de trabajo, estudios u hogares, viéndose obligados a recurrir a los vehículos de la llamada “ruta chivo”, o a colas, para llegar a sus destinos.
Este miércoles, las paradas de Transbarca se encontraban congestionadas de personas con la esperanza de abordar alguna de sus unidades que, de acuerdo a usuarios, resultan insuficientes.
“Tengo más de una hora esperando el autobús y nada que llega, y si aparece viene completamente lleno, por lo que tendré que seguir esperando, o me iré caminando”, expresó una mujer en una estación de la avenida Florencio Jiménez.
En la de la redoma del Sol Naciente, en Las Trinitarias, poco después de las 9 de la mañana, la cola hacía un círculo por la gran cantidad de usuarios en espera.
También habían multitudes en las estaciones de la avenida Venezuela, en especial la ubicada en la intersección con la Vargas.
Cada uno de los autobuses rojos, incluso los articulados, circulaban repletos de personas, muchas de ellas paradas.
Mientras tanto, las pocas busetas de rutas, afiliadas o no al Sindicato Automotor, también circulaban abarrotadas de personas, algunas, prácticamente colgando de sus puertas, pese al peligro que representa y en muchos casos ante la mirada indiferente de funcionarios policiales o de tránsito.
También se observaban camionetas, furgones y camiones, incluso volteos, cargados de mujeres y hombres que, ante las deficiencias del sistema de transporte colectivo de la ciudad, se veían obligadas a utilizarlas para llegar a sus destinos.
A nivel del Sindicato Automotor, su secretario general, Giovanny Peroza, informó que el paro técnico que, enfatizó, no es general sino técnico, por falta de repuestos para reactivar las unidades averiadas, continuaba.
Para este jueves estaba programado un consejo consultivo de las directivas de las 50 rutas afiliadas, incluidas algunas de rapiditos, para decidir las nuevas acciones a tomar, aunque para la tarde no había sido confirmado.
Dijo que estaban pendientes de un recurso de amparo contra el paro introducido por la alcaldía de Iribarren, sobre el que, hasta las 5, no habían recibido ninguna información oficial.
“Lo que necesitamos es que lleguen a acuerdos para que tengamos transporte”, dijo un usuario en una parada.
Recurso de amparo contra el Sindicato Automotor
En horas de la mañana del miércoles, el Director General de la alcaldía de Iribarren, Luis Contreras y el de la AMTT, Lino Rodríguez, introdujeron en la Unidad de Recepción y Distribución de Documentos, (URDD), del Poder Judicial, un recurso de amparo contra el Sindicato Automotor.
Contreras pidió a los transportistas respetar la ley, “como lo está haciendo el alcalde Luis Jonás Reyes y ellos tenían una reunión y le dieron una patada a la mesa”.
“Estamos seguros que vamos a acabar con las mafias sindicales”, dijo, por su parte, Lino Rodríguez.
Acusó a los dirigentes del sindicasto de extorsionar al pueblo, lo que, afirmó, “no lo vamos a permitir”.
Informó que entregarán insumos sólo a los transportistas que deseen trabajar.
Una vez introducido el documento en la URDD, allí se decidirá a cuál tribunal civil se distribuirá para que tome una decisión que obligue al Sindicato Automotor a dejar sin efecto el llamado paro técnico en vigencia desde hace varios días e intensificado el pasado lunes.