Este viernes se realizó una misa en la iglesia de Santa Rosa, en honor a los caídos en los enfrentamientos realizados en el transcurso del mes de abril hasta julio del 2017, que dejaron un saldo de al menos 127 muertos, en su mayoría adolescentes luchadores, quienes demostraron su descontento con el Gobierno nacional.
Cientos de personas estuvieron presentes en el templo, recordando aquellos difíciles días donde pasaron muchas angustias preocupados por esos familiares que estaban presentes en las protestas. Una larga lucha, un cambio, la paz, la reconciliación y la reestructuración de un país abandonado fueron los objetivos propuestos por aquellos jóvenes que se hacían llamar: resistencia.
Las lágrimas corrían por el rostro de los familiares y amigos que estaban en la celebración religiosa, demostrando su pesar sin poder controlar el llanto y la amargura de no tener a ese ser querido con ellos. Entre ellos comentaron lo difícil que fueron estas Navidades sin contar con la presencia armónica de compartir en familia como lo solían hacer todos los años.
Banderas, frutas, pancartas, rosarios, se ofrendaron a los párrocos para conmemorar a gran parte de los jóvenes que no solo cayeron en las protestas, sino aquellas que fueron víctimas de la delincuencia desatada el año pasado. Los cánticos fueron los protagonistas de encender y mantener siempre presente la ausencia de los que se fueron.
Durante la sagrada eucaristía los sacerdotes hicieron presente aquellas personas que se fueron del país, y emprendieron una nueva travesía por seguir adelante, trabajando para brindarles un mejor futuro a sus familiares.
En la misa estuvieron presentes los familiares de algunos de los caídos en Barquisimeto, sin embargo, mantuvieron presente mediante pancartas a: Gruseny Antonio ‘Tony’ Canelón, Yoiner Peña, Eduardo Orozco, José Miguel Pestano, Brayan Principal, Nelson Arévalo, entre otros caídos, víctimas de la represión por parte de la Guardia Nacional Bolivariana.
Al finalizar la misa, la canción «Venezuela» se hizo sonar en el templo, generando emoción y tristeza entre los asistentes. Durante la interpretación, con pancarta en mano de los fallecidos, demostraron su pesar a todo pulmón. Sin lugar a dudas, un momento muy emotivo para todos que perdurará por mucho tiempo en la memoria del colectivo.