El Gobierno ha debido haber procedido a detener la circulación de una moneda inconstitucional y, desde luego, ilegal como es el “panal”, que está siendo utilizada en Caracas.
Así lo manifestó el Dr. Edgar Urbáez, economista, abogado y docente universitario, al ser entrevistado por EL IMPULSO.
-¿En qué forma atenta contra los principios fundamentales de la Constitución la aparición de ese papel moneda, precisamente en momentos en que el signo monetario nacional viene perdiendo valor?
-Constituye una violación total de la Constitución. El artículo 318 dice que la unidad monetaria es el bolívar. Si hubiera otra moneda en el marco de la integración latinoamericana y del Caribe, tenía que proceder de un tratado, que para entrar en vigencia debe ser ratificado, según el artículo 187 numeral 18, por la Asamblea Nacional, que es la que tiene esa atribución.
Además de violar la Constitución, la moneda en cuestión que está circulando en Caracas o en algunos sectores de la capital también violenta los principios de la ley del Banco Central de Venezuela. Claramente, es un exabrupto y una decisión que no tiene sentido, porque no va a arreglar los grandes problemas económicos que tiene el país, entre los cuales destaca el desabastecimiento de alimentos y medicinas, la inseguridad individual y jurídica, la desnutrición no sólo de los niños sino de toda la población y todos los demás males que afligen a la gente.
-¿Qué medida inmediata debe ser tomada?
-El Banco Central está obligado por su propia ley a no darle entrada a este tipo de moneda, ya que distorsiona la corriente monetaria establecida en el país. Y, por supuesto, el Ejecutivo Nacional está llamado a actuar para impedir que circule esa moneda.
-¿Qué tipo de sanción podrá ser aplicada?
-El que recibe moneda de otro tipo a la unidad monetaria establecida en la Constitución estaría cometiendo delitos penales y debería ser sometido a la fuerza de la justicia, porque no hay razón jurídica, lógica, económica, financiera, para interpretar ese tipo de acciones que están fuera de la ley y de la Constitución.
-¿Antes se había producido una situación como esta?
-Nunca. La unidad monetaria siempre ha sido el bolívar en sus distintas manifestaciones, ya sea en papel moneda o metálico. Es por ello que los organismos del sector financiero que tienen que ver con la materia deben de inmediato colaborar para impedir que estas acciones se sigan cometiendo, ya que acarrean responsabilidades muy graves para quienes lo ejecutan y ponen de manifiesto un desconocimiento total del orden jurídico nacional.
-¿Acaso será consecuencia del caos que existe en el país?
-No podría hablar de ese asunto, sino de hechos. La política monetaria de Nicolás maduro ha sido un barco a la deriva. Aquí los funcionarios del más alto nivel del Gobierno han fracasado con el control de cambio, ya que hay varios tipos de cambio. Fracasaron con el cono monetario, porque existen dos. Fracasaron con la cesta de moneda, puesto que incorporaron la rupia india, el rublo ruso y los yuanes chinos. Y van a fracasar con la denominada criptomoneda Petro, que es otra violación de la Constitución y las leyes del sector financiero. Y si permiten la circulación de esta moneda, indudablemente, incurrirán en violación de la Constitución y las leyes porque están obligados a impedir que haya una moneda distinta al bolívar.
-¿No cree que esta moneda ha surgido para dar cabida al trueque, que fue una idea lanzada por Chávez y la figura de éste aparece en el nuevo billete ilegal?
-En un foro que se realizó en la Universidad Bicentenaria, de Aragua, tuve un enfrentamiento analítico con el sociólogo y activista alemán Heinz Dieterich Steffan, el autor de la tesis del “Socialismo del siglo 21” que recogió Chávez como su idea para establecer su dictadura, cuando ese autor promovía el trueque. Le demostré en esa ocasión que era imposible volver a esa práctica del pasado cuando no existían políticas monetarias.
En la economía hoy día hay diversidad de productos, de variadas formas y volúmenes. Eso fue posible en la sociedad cuando existían cinco o seis productos que podían intercambiarse. En los momentos no puede usted cambiar un producto por otro, mucho menos en estas circunstancias que estamos viviendo.
Consecuencia de delincuencia organizada
Pedro Pablo Alcántara, ex parlamentario de la Asamblea Nacional y dirigente nacional de Voluntad Popular, declaró que la aparición de elementos monetarios para la transacción de operaciones sin la debida fundamentación legal, ni el respaldo económico, ni de reservas, constituye una demostración de anarquía.
Pareciera que fuera el resultado del estado de desesperación de la población frente a la pérdida absoluta de las monedas de circulación legal y el preámbulo de una canibalización en las relaciones sociales.
Pero una moneda ilegal, como la que ha venido circulando en algunos sectores de Caracas hasta ahora, sólo puede ser implantada a la fuerza, por lo cual se configura un estado mafioso con sus nefastas consecuencias.
Las autoridades deberían actuar en dos vías: primero, procediendo a sincerar la realidad de la moneda venezolana y, segundo, prohibiendo el uso de monedas fuera del marco legal, así como la investigación acerca de sus promotores y las sanciones ejemplares contra esta forma de delincuencia organizada.
Curiosamente se viene a emitir una moneda ilegal tras haber la prensa española publicado el escándalo del Banco Privado D’Andorra (BPA), donde funcionarios de PDVSA habían colocado enormes sumas de euros. Pero, lo que más llama la atención es que en la primera quincena de marzo del 2015, diputados opositores acudieron a la Fiscalía General de la República para solicitar una exhaustiva investigación sobre 4.200 millones de dólares depositados por funcionarios venezolanos en esa entidad financiera, denuncia que no tuvo respuesta desde entonces.
Y este escándalo sucede al que se ha producido dentro de PDVSA y Citgo, que ha originado detención de más de sesenta funcionarios, incluyendo dos ex presidentes de la empresa y ministros de Petróleo. El encubrimiento de los casos de corrupción y derroche ha caracterizado al régimen.
De no detenerse el caso del denominado billete “panal” surgirán otras organizaciones delictivas emitiendo otras monedas en el territorio venezolano ante la omisión o complicidad desmesurada del régimen de Maduro, manifestó Alcántara.