Por el alto grado de desatención de las autoridades municipales, pasa totalmente desapercibida la plaza situada frente a El Parque Botánico El Cardenalito, al este de Barquisimeto.
Pese a que el espacio público se ubica en una zona de mucha movilidad vehicular y peatonal, justo en la salida de la ciudad hacia el estado Yaracuy y zonas centrales de Venezuela, la plaza no presenta ningún atractivo para los citadinos debido a que no le ha llegado la atención municipal, en cuya competencia está el cuido y mantenimiento permanente.
“Preservemos el Planeta Tierra”, se lee en letras de hierro que descienden en forma vertical adheridas a un pedestal de concreto, en cuyo extremo superior está instalado el logo del Rotary International.
Exactamente todo lo contrario ha ocurrido con el debido trato que se le debe aportar a la plaza, en virtud que la oportuna recomendación dada por la loable institución en su obra allí edificada, ha sido desatendida e ignorada por el municipio, que en lugar de trabajar para conservar este ambiente necesario para la convivencia humana y social, que tanta falta hace en medio de esta vida estresante que se enfrenta a diario, no gestiona su debido y adecuado cuido.
En toda su extensión, la plaza carece de engramado, no posee bancos y los árboles que son fundamentales en la regulación climática y la producción de oxígeno requieren atención.
Las áreas verdes y ornamentales tampoco son prioridad en la alcaldía de Iribarren para esta plaza.
No se observa sistema de riego para los árboles que es casi seguro necesitan un estudio fitosanitario adecuado a las necesidades de las especies ahí plantadas, los cuales se encuentran descuidados.
Vecinos del lugar señalan que la referida plaza debería convertirse en un espacio botánico propicio para el encuentro social, y que las instancias con competencia en cultura y educación de la alcaldía programen actividades destinadas a la recreación y diversión para todos.
Hoy, caminar el interior de esta plaza representa en gran escala formar parte de la lista de víctimas de atracos que se consuman diariamente por parte de un grupo de sujetos que usa como hábitat este lugar. Los despliegues policiales no se conocen a ninguna hora del día, y durante la noche la oscuridad es la protagonista, donde se instalan todo tipo de delitos contra los ciudadanos que ameritan pasar por sus cercanías.
Deportistas a todo riesgo
El Parque Botánico El Cardenalito es un lugar donde convergen jóvenes y adultos para ejercitarse.
Ha sido tomado principalmente para entrenamientos de resistencia cardiovascular por tratarse de un terreno de bajadas y subidas, idóneo para este tipo de prueba física.
No obstante, también necesita vigilancia policial que proteja a quienes lo visitan.
Aun sin estatua
La Plaza La Mora continúa sin la estatua de Juan de Villegas y uno de los sus perores descuidos, a pesar de encontrarse en la zona centro de la ciudad.