Comerciantes del municipio Palavecino, estado Lara, aún se muestran escépticos con el sistema Pago Móvil Interbancario propulsado por el Gobierno nacional hace más de 10 días.
Este tiene como finalidad la realización de pagos inmediatos, a través de una aplicación móvil y posteriormente por mensajería de texto; sin embargo, la falta de información, la inseguridad y la inaccesibilidad a la tecnología impiden que esta política pública termine de cuajar.
“Nosotros no tenemos punto de venta y para mí resulta muy buena esta idea. Pero son pocos los que saben utilizarlo. No llego ni a ocho clientes que me han pagado así”, dijo Pedro Méndez, encargado de un negocio en Cabudare Centro.
La rapidez de la transacción, según contó, depende de la velocidad del servicio de internet.
“Hasta ahora con los bancos privados como Banesco y Provincial nos ha ido bien. El pago cae de una vez. Tendremos que esperar qué sucede con los públicos”, contó.
Explicó que esta modalidad permite recibir hasta 800 mil bolívares diarios.
Por su parte, el usuario se niega a utilizar el sistema para no exponerse a ser víctima de la delincuencia. Además, sin teléfono inteligente no puede hacer uso del mismo.
Sin embargo, quienes lo han implementado lo valoran positivamente, como también sencillo, ante la falta de efectivo y la lentitud de los puntos de venta.
“Yo en la calle no saco el teléfono, solo lo hago en negocios de confianza. Me lo explicó la muchacha que vive conmigo y es rapidísimo”, declaró la señora Claret González.
Desde la Cámara de Comercio del estado Lara también ven con incredulidad el Pago Móvil, según lo declarado por la presidenta Rita Betancourt.
“Se ha hecho bulla del tema pero indudablemente no ha tomado fuerza. Nuestros comerciantes aun no la tienen clara”, señaló.
A su juicio, con la implementación del sistema el Gobierno nacional reconoce la escasez de dinero en efectivo en el país que no solo afecta al sector comercio.
“No creo que sea la panacea de la situación”, concluyó.
