#Opinión: ¡Civiles temblad! Por: Antonio José Riera Chávez

El militarismo se caracteriza por el desprecio hacia el mundo civil al cual considera débil y desorganizado aun cuando los factores de progreso y desarrollo provienen del mundo de los trabajadores, diametralmente opuesto al militar.
El militarismo en el Poder se hace más parasitario sin aportar otra cosa que el uso de la fuerza y la represión para manipular la sociedad bajo las conocidas consignas de: Patria, libertad, soberanía, etc., las cuales suelen ser adornadas como en nuestro caso por un calificativo especial que en nuestro pais es el socialismo aun cuando para nada cuadre un mundo de trabajo con una burocracia militar.
El militarismo logra su máximo apogeo cuando logra encontrar un líder popular venido del mundo militar favorece ese intento de sumir al mundo civilista bajo la bota militar con el cuento de cuartel de que el comandante en jefe es un pobre pata en el suelo cuando la realidad es que se convierte en el Gran Burgués con solo aportar su cháchara demagógica y fantasiosa.
En estos trances de la política, el civil debe organizarse y reclamar sus espacios evitando el colaboracionismo que en fin de cuentas lo llevará a la esclavitud y el marginamiento no solo para sí sino para sus allegados. Actualmente ha quedado claro por voz y acción del propio Jefe Único que los civiles son desechables en cuanto a las necesidades básicas del militarismo que pugna por llenar todos los espacios  porque siendo una farsa el socialismo del siglo XXI se necesita es de militares obedientes más que líderes surgidos de un partido o de la propia comunidad.
El dedo del Supra Líder lo decide todo y el que se manifieste en contra se le aplica todo el peso propagandístico del sistema dictatorial para desecharlo y calificarlo por lo menos de traidor Imperialista. El mundo cuartelario muchas veces irracional se hace cotidiano y el Líder se convierte en Dictador Militar arrogándose todo el control institucional tras de sí en el infinito absurdo de creerse el Mesías.
Sin embargo, como las elecciones son parte hoy día de los derechos de los pueblos y de la democracia (salvo excepciones) en este militarismo del siglo XXI se pone en juego la contradicción de vivir bajo un patrón donde los militares corruptos sean la democracia o la gente de trabajo, honesta y capacitada dirija la sociedad . No hay otra. Eso de socialismo o capitalismo. Burgués o trabajador. Es parte de una “muela tramposa” para esclavizar ingenuos. La cuestión es entre trabajadores(incluidas amas de casa y estudiantes) vs militares corruptos. Mas na’.