El presidente de la Federación Nacional de Ganaderos (Fedenaga), Carlos Albornoz, afirmó este miércoles en Unión Radio que a pesar de que la situación actual es compleja tanto para el sector agrícola como el ganadero, hay un compromiso de cambio, de cara a los comicios regionales que se realizarán el 15 de este mes.
“Aunque nos encontramos en una situación precaria, seguiremos luchando por Venezuela, pues somos la herramienta de cambio que va a revertir la inflación y que va a ayudar a disminuir los precios; sin embargo, hace un falta cambio de modelo económico porque el actual lleva al país a la máxima inflación y al sueldo mínimo más bajo del mundo”, dijo Albornoz.
En cuanto al consumo de la carne en el país, aseguró que los consumidores no pueden comprar la que se está produciendo, debido al deterioro de la capacidad adquisitiva de la población. “Si producimos no nos lo compran y el venezolano no puede adquirir la carne porque el salario mínimo no alcanza”, apuntó.
Señaló, además, que no se puede producir con el problema que aqueja al sector en lo relativo a maquinarias e insumos necesarios para trabajar. “No se puede producir con tractores que tienen la vida útil vencida. Si se pudiese reponer la maquinaria dejando de enviarle petróleo a Cuba por un mes o usando un poco de la renta petrolera para recuperar 17 mil tractores e insumos, el país podría producir la harina de maíz blanco a 40 %, el huevo, el pollo, la soya, y todo dentro el aparato productivo lácteo”, indicó.
Por su parte, el presidente de Fedeagro, Aquiles Hopkins, sostuvo que la problemática para producir se traduce en desabastecimiento, asunto que el gobierno debe resolver con seriedad y responsabilidad.
“De cada cuatro arepas que usted podía comer, solo podemos producir una, pues solo el 25 % de la harina de maíz es producida en Venezuela. Solo se produce en el país el 40 % del arroz y con el café, con el azúcar, se vive la misma situación que con la harina de maíz”, refirió Hopkins a modo de ejemplo.
Agregó que la solución contra la escasez es que el gobierno actúe para que los productores agropecuarios puedan producir, a través de políticas que los provean de semillas, abonos, fertilizantes y agroquímicos. “En Venezuela hay cientos de hectáreas que lo que dan es pena luego de ser expropiadas y que actualmente podrían estar siendo utilizadas para producir”, indicó al respecto.