Las familias de Palavecino, en especial las residentes en la parroquia José Gregorio Bastidas, se encuentran desesperadas, y con suficiente razón, a causa de las ya muy frecuentes suspensiones en el suministro de un elemento tan indispensable como es el agua.
“Ya estamos cansados de tanta mamadera de gallo; que si se robaron unos cables en el pozo tal, que si rompieron los transformadores en la estación tal, que si sabotearon la subestación, ya no encuentran que argumentar para tratar de justificar la ineficiencia en Hidrolara”, afirmó Reina Ledezma, residente en la urbanización El Recreo.
Dijo que llevan más de dos semanas sin recibir agua normalmente y que la misma situación la mantienen los habitantes de El Trigal, El Paraíso, Almariera, Los Rastrojos, Las Mercedes, La Merendera y otros sectores residenciales del noreste de Palavecino.
Extraoficialme se conoció que de las cuatro válvulas de la estación de bombeo de El Recreo sólo funciona una, pues las otras dos se dañaron y ha habido demora en la reparación, supuestamente debido a las guarimbas.
Sin embargo, un habitante del sector también dijo que, supuestamente, el problema se debe a un conflicto que mantienen los llamados operadores de producción por la retención de ciertos pagos desde hace meses.
En la tarde, Pedro Sánchez, presidente de la hidrológica, informó que ayer comenzaron a instalar una nueva válvula de 16 pulgadas con la que se espera regularizar el suministro hoy o mañana.
Aclaró que el trabajo no lo hab ían podido hacer debido por la falta de seguridad para los técnicos en el área donde debe instalarse el nuevo equipo.
Mientras tanto, las familias sigue padeciendo las consecuencias de la falta de agua, tratando de llenar cuanto recipiente tengan cuando lleguen, interdiario,algunos chorritos.