En un duro duelo que se definió por apenas tres centímetros, la venezolana Yulimar Rojas perdió la pulseada con la colombiana Caterine Ibargüen, para conformarse con la medalla de plata en la prueba de salto triple en la segunda parada de la Liga de Diamante que se realizó en Mónaco.
La neogranadina se hizo de la victoria en el último salto y demostró porqué es una leyenda en este tipo de pruebas, al lograr una distancia de 14 metros y 86 centímetros, un turno antes la criolla se había montado en los 14.83. En una justa en la que las demás exponentes fueron prácticamente de relleno.
Rojas dominó la prueba desde el primer al quinto salto al dejar marcas de 14.44, 14.72, 14.46, falló y 14.52, cuando sumó el 14.83 parecía que el puesto más alto del podio era suyo, pero la determinación de su rival pudo quitarle el cetro.
El tercer lugar de la justa se lo quedó la jamaiquina Kimberly Williams, quien ostentó 14.64 metros, en una prueba en la que participaron 11 atletas.
Entre las suramericanas se ha formado una rivalidad importante en los últimos años, en la primera parada de la Liga de Diamantes realizada en Roma (junio), Rojas se apuntó el lauro con 14.84 metros, 10 centímetros más que Ibargüen.
Rumbo al mundial
Con esta presentación en Mónaco, la venezolana está a tono para afrontar su primer mundial adulto que se efectuará en Londres del 4 al 12 de agosto y en el que revivirá el duelo contra la colombiana.
Uno de los puntos positivos de la justa es que Rojas demostró plenitud física luego de su lesión en el Suramericano de Paraguay en junio.