¡Se acabó la espera! Pueden contarlo por siempre. Los Guaros de Lara de Jorge Hernández, 34 años después de que lo hicieran aquellas Panteras de Alexis Saldivia un 21 de junio de 1983, también en un sexto juego de la serie final de la entonces llamada Liga Especial y también de regreso a Barquisimeto con ventaja de 3-2, entonces ante los Gaiteros del Zulia, repitieron la faena y derrotaron en seis juegos a Marinos de Anzoátegui, al aplastarlos 100-72 en un Domo Bolivariano sin asientos desocupados.
Ellos, que lo quisieron tanto, tuvieron que esperar mucho tiempo para lograr en casa lo que ya se les había dado afuera y con este cetro ostentan el título nacional (LPB 2017), de América (Liga de las Américas FIBA 2016 y 2017) y del mundo (Copa Intercontinental FIBA 2016), algo que desde la creación de este último torneo solo lo ha logrado el Real Madrid de España en el año 2015.
En la etapa de Carlos García Ibáñez como propietario, el bando crepuscular fue subcampeón en las temporadas 2005 y 2006 tras haber ingresado al circuito en 2003 en sustitución de Bravos de Portuguesa. Esa afición llanera no olvida aquel nexo y anoche había una pancarta de aficionados de Guanare en apoyo a Guaros en lo alto del Domo.
Desde la adquisición del equipo por parte de Hernández en 2012 llegaron el subcampeonato LPB 2015, los cetros de Liga Nacional en 2014 y 2015 y los torneos internacionales de clubes antes citados. En agenda esta defender la corona Intercontinental contra el Iberostar Tenerife (España) en septiembre, jugar una vez más la LNB y la Liga Sudamericana (LSB) y defender el título de la Liga de las Américas 2018, amén del de la LPB. Hay básquet para rato.
Tomar decisiones a tiempo, algo que hizo el gerente deportivo José David Hernández, encausó a Guaros. Una segunda mitad de 14-4, unos playoffs con seguidilla de nueve triunfos y récord global de 12-3 y una foja de 22-5 desde la llegada del coach argentino Guillermo Vecchio, además de lo que hizo antes para traer a Elvis Báez, José Vargas, Nate Robinson, Lazar Hayward y compañía, moldearon este éxito.
Trabajó en silencio y hasta recibió el premio a Gerente del Año por parte de la LPB. Que hablen los resultados.
El video fue un augurio. Cuando Guaros mostró antes de la presentación de los jugadores locales, en las pantallas superiores a los cuatro costados del Domo, las imágenes de las celebraciones de Deportivo Lara (6 de mayo de 2012) y Cardenales de Lara (29 de enero de 1991), en ocasión de sus primeros títulos como franquicia en el fútbol y el béisbol, respectivamente, se puso el listón alto.
Esa noche del 5 de julio tenía que ser la noche para inaugurar su propia cuenta y hacer historia. Lo que no pudo hacer primero en casa y ya había saboreado en el ámbito internacional, esta vez sí pudieron concretarlo y de qué manera.
A pesar de las circunstancias que atraviesa el país y a las que Guaros no fue ajeno –Jorge Hernández lo dijo en sus palabras a los aficionados desde la mitad del tabloncillo- el gimnasio que también acogió el título de las Panteras en 1983 volvió a plenarse con muchas más de las 8.000 personas que caben con comodidad en sus remozados espacios. Se acabó la espera. Pueden contarlo por siempre.
