Con las recientes precipitaciones en el estado Lara, volvieron a presentarse derrumbes en la carretera Lara-Zulia, a la altura de Pozo Guapo, impidiendo la normal circulación de vehículos.
Lento se mantuvo el tránsito automotor en estos días recientes, ante la falta de maquinarias que hicieran a un lado los montones de tierra. Los propios habitantes de la zona se ocuparon de la limpieza.
Con palas y hasta cepillos de barrer, eliminaron el obstáculos para los conductores de cargas livianas y pesadas.
Las personas que se acercaron para ayudar en la carretera, explicaron que en ese punto de la vía, la situación es la misma cada vez que llueve.
Sin embargo, la Alcaldía de Torres no toma las previsiones ni envía las máquinas: “Deben hacer un trabajo amplio, construir un muro de contención, impedir de cualquier forma que la vía pierda dos canales porque el caos se forma inmediatamente”, expuso el vecino de Pozo Guapo, Jesús Díaz.
Asimismo, la comunidad se queja del deterioro de la capa asfáltica a lo largo de la importante plataforma vial donde circulan miles de vehículos a diario. Si bien existen tramos recientemente pavimentados por el financiamiento del Gobierno nacional, en esos lugares recién asfaltados no hay señalización. Falta el rayado y ojos de gato que facilitan la visibilidad de los choferes.
En las noches, resulta un verdadero peligro manejar por la carretera Lara-Zulia donde los carros a toda velocidad pudieran ocasionar accidentes. En este sentido, solicitan que la demarcación de la vía se realice a fin de garantizar la seguridad de los conductores y demás usuarios.
También es necesario la iluminación en la vialidad, una petición que hacen los residentes de caseríos cercanos, acechados por la inseguridad de la zona. En motos y carros, delincuentes siembran pánico entre los humildes moradores y no hay quién los defienda de esa realidad.
Foto: Elías Rodríguez