Pido la palabra – A la CEV… un último ruego

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Estamos en presencia de una situación país tan grave, que en lo personal, pensamos que solo era posible en lejanas latitudes como Africa o el Medio Oriente. Sin embargo, luego de ver los demonios verde oliva recorriendo las calles de Barquisimeto con música a todo volumen, pisoteando el dolor y la sangre de un pueblo que pide elecciones libres y democráticas, entendemos los desquiciamientos humanos ligados a la ostentación del poder, como la expresión de mentes enfermas que se hacen de él para pervertirlo y usarlo contra sus pueblos. Un amasijo de creencias y resentimientos se conjugan en las almas oscuras de elementos que se creen dioses terrenales capaces de todo. Alienados de maldad roban, saquean y asesinan. Desafían las fuerzas intangibles de la naturaleza como manifestación divina y pretenden igualarse a Dios en sus designios. Sociedades cultas y avanzadas en relación a otras, han padecido de estas aberraciones históricas con costos en vidas humanas muy lamentables. Faltarían líneas para citar ejemplos que ilustran estas enfermedades del alma que castiga y alecciona sociedades…
En nuestras dos entregas anteriores hemos hecho un llamado a la Conferencia Episcopal Venezolana para que tome la decisión de sacar en peregrinación nacional a la Virgen María, representada en todas las Patronas de cada región de Venezuela para que nuestro pueblo se una en oración por la paz, la reconciliación y el perdón entre venezolanos. Los acontecimientos se han tornado tan delicados en los últimos días y la represión se ha agudizado de tal manera para continuar con el fraude constituyente, que ahora más que nunca nuestra solicitud se transforma en un ruego. Nos están masacrando en la calle. Los demonios de la muerte salieron sin recato de ninguna naturaleza a derramar la sangre de nuestro pueblo. La comunidad internacional se entretiene en sus letanías diplomáticas mientras el ángel de la oscuridad se goza en la maldad. Nadie quiere comprometer la tajada que le toca de un país descuartizado económicamente por la colonización cubana. Estamos solos con nuestra Fe…
Ha llegado la hora de que DIOS hable. No es precisamente Francisco con sus frases diplomáticas en resguardo de posturas que responden más a paradigmas personales que a nuestra realidad. No es el Vaticano con sus burócratas bañados en oro y linos. No es ningún interlocutor extranjero con motivaciones crematísticas. No es el gobernante enloquecido que busca la vía de escape más adecuada a sus oscuros intereses. No es nadie más que nosotros mismos con nuestra conciencia. En este momento lo único procedente es la vocería de nuestra Fe ciudadana en la calle llenando de amor el territorio nacional para expulsar los demonios y reconquistar la paz. Es la Virgen María cubriendo de bendiciones nuestro país para curar las heridas dejadas por esta doctrina diabólica que nos invade. Es la sangre inocente que tiñe de rojo el territorio nacional purgando las culpas ancestrales que nos condenan…
Mis comentarios:
-El régimen maléfico en Lara actúa cargado de una saña sin precedentes con los órganos represivos y los colectivos sembrando horror a su paso…
-Pero frente a la Divina Pastora no se atrevieron…
-Un último ruego. Una súplica a la Jerarquía Eclesiástica de Venezuela para que saque a la Virgen María en peregrinación nacional…
Yo te instruyo sobre el camino de la sabiduría, te encamino por senderos rectos… (Proverbios 4:11)
Sergio Borgel

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