El Deportivo Lara puso punto final a su tercera semana de pretemporada en la que se dieron un par de partidos amistosos con el propósito de rellenar sus arcas con la mayor cantidad fútbol posible para cuando deba hacer frente, en paralelo, al torneo Clausura y Copa Venezuela, ambos considerados puntos de inflexión en el propósito de conseguir plaza en los torneos internacionales del concierto correspondiente a Conmebol para el año 2018.
También en estas primeras semanas la dirigencia rojinegra ha tenido la tarea de, lupa en mano, conseguir las fichas necesarias que permitan aquilatar el potencial, además de tener que haber dado de baja a piezas que no encajaban en los circuitos de los técnicos Leonardo González y Pedro Vera, a quienes, semanas antes se les brindó voto de confianza.
Así, en medio del tráfago correspondiente a las primeras semanas, las bajas, entre otras, de Octavio Zapata, Joel Infante, Daniel Briceño, Jarlin Quintero y Darwin Gómez, canjeado a las filas del Deportivo Táchira.
También, en el interín del trabajo y las cargas, la incorporación de nuevas piezas, como los argentinos José Antonio Michelena en primera instancia y luego Lucas Gómez, éste último procedente del fútbol costarricense al formar parte del Club Cartaginés.
Gómez, en trabajo del departamento de prensa rojinegro, presenta un palmarés que resume 1.100 minutos de juego en 16 compromisos, 13 de ellos como titular, 5 goles y desempeño en el área, sin negarse al trabajo por los costados en funciones de pivoteo.
Hay otras fichas del universo criollo que se han incorporado a recibir las instrucciones de la dupla González-Vera, como el caso, entre otros, de Jesús “Patoncito” González, Carlos Salazar, José Miguel Reyes y Fidel Díaz.