Colapsó una alcantarilla al este de la ciudad. Más de cinco días tiene un bote de aguas negras afectando a los residentes y transeúntes que circulan en la avenida Bracamonte con Venezuela.
En el sitio, el olor es fétido y completamente nauseabundo. Es tanta la cantidad de aguas negras que salen de aquella cloaca que el caudal se extiende por lo largo de toda la avenida Venezuela y pierde fuerzas en las inmediaciones de Los Leones.
Se nota que quienes circulan por allí en sus vehículos personales, apenas comienzan a sentir el hedor suben su ventanilla para combatir la náusea.
En el sitio igualmente transitan gran cantidad de autobuses que se trasladan hacia Acarigua y Yaritagua.
Anteriormente, las inmediaciones de la zona eran usadas como paradas pero los peatones se rehúsan a permanecer en el lugar y cambiaron el lugar de abordaje, unos pasos más adelante.
Igualmente los transeúntes cuando circulan por allí proceden a cubrir sus orificios nasales para no inhalar un agente que evidentemente es dañino para su salud.
Algunos habitantes de la zona comentaron que en la tardes, justo cuando la radiación solar impacta con mayor potencia sobre el pavimento, la fetidez se convierte en algo insoportable. Igualmente sucede con las precipitaciones.
Este miércoles cuando las fuertes lluvias cayeron sobre la entidad, la zona estaba inundada tanto por el agua de cloaca como por las lluvias, lo que facilitó el traslado y recorrido de las aguas negras.
