“No puedo dejar de regresar al espacio de luz del que jamás me he desvinculado. Esa insistencia en permanecer se vuelve silencio largo y lo trasladó de un sitio a otro. Porque cuando se aprende a estar bajo un mismo cielo, los otros no son sino cubiertas de poca densidad y apenas pueden definirse ante la luminosidad de la primera; esta nos persigue y en ella continuamos conviviendo con personas, con polvo y resolana, con partículas de toda naturaleza”, es el extracto de un poema escrito por el doctor Jesús Antonio Herrera. Personaje emblemático y periodista icónico de la entidad.
El estado Lara, en específico el pueblo de Carora, amaneció de luto este sábado 6 de junio, debido a la lamentable desaparición física de Jesús Antonio Herrera.
Este emblemático personaje larense tenía 64 años de edad al momento de su fallecimiento. Jesús Antonio Herrera fue hijo de don Antonio Herrera Oropeza, segundo director del Diario de Carora y nieto de José Herrera, fundador de ese mismo medio.
El director editor de EL IMPULSO, José Ángel Ocanto, recordó que Herrera desde temprana edad fue reconocido por la pasión que tenía por las letras y la poesía. Ocanto resaltó que Herrera fue una persona marcada por la herencia de una familia con vocación periodística tradicional.
Fue un profesional que se dedicó a sus estudios de periodismo en la Universidad Central de Venezuela y de forma simultánea al derecho en la Universidad Santa María. Igualmente realizó un doctorado en Puerto Rico. Admirado por su talento y capacidad intelectual, y por haber dedicado gran parte de su vida a la docencia y formación; basada en los valores.
Tal y como lo detallan sus discípulos, fue un golpe duro enterarse de esta pérdida. El actual director del Diario de Carora, Javier Oropeza, relata que Jesús Antonio Herrera fue ejemplo de trabajo y dedicación en medio de las dificultades.
Recordó que gracias a su valentía y pasión, una vez que el Diario EL IMPULSO se trasladó hacia Barquisimeto, decidió que el Diario de Carora debería ser el legado periodístico en esa tierra y con esfuerzo lo logró. “Hasta hoy ha habido un archivo de hemeroteca que mantiene viva la historia de Carora y es gracias al legado que él junto a su padre y abuelo nos dejaron”, expresó.
Herrera fungió el cargo de rector fundador de la Universidad Fermín Toro y contribuyó con la formación de la escuela de Comunicación Social. También se le atribuye la autoría del lema de esa casa de estudios: “Educación para los valores humanos”.
Igualmente dirigió la Universidad de la Tercera edad en Barquisimeto. Posteriormente representó a algunas instituciones educativas de Maracaibo, donde lamentablemente lo sorprendió la muerte a temprana edad.
Tal y como comentó, José Ángel Ocanto, aún se esperaba mucho de su talento y admirable y capacidad intelectual, abonado por muchas vocaciones de servicio que representan el gentilicio caroreño y su ambición de cultivarse en las letras y la literatura.
A Herrera corresponde despedirlo este domingo en unas honras fúnebres que se efectuarán en la iglesia matriz San Juan Bautista de Carora. “Acto que sin duda constituirá una manifestación profunda de pesar”, expresó Ocanto.
Los restos fueron trasladados desde Maracaibo hacia Carora este sábado y serán inhumados junto a los de su padre.