La actuación que ha presentado la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB) contra los manifestantes y periodistas durante estos días de protestas pacíficas, es vergonzosa ya que este comportamiento no corresponde al de un funcionario de cualquiera de estas instituciones, en el debido ejercicio de sus funciones.
Así lo manifestó la diputada a la Asamblea Nacional, Yajaira Castro de Forero, quien denunció que los cuerpos de seguridad del Estado se encuentran violando los derechos humanos de los venezolanos.
«Estas personas que hemos visto agrediendo y robando a los manifestantes no pueden llamarse funcionarios policiales. Ellos son simplemente delincuentes uniformados, que no hacen más que dañar la imagen de estas instituciones”, agregó.
Ante esta realidad, la parlamentaria responsabilizó al ministro de Interior Justicia y Paz, Néstor Reverol, y al ministro de la Defensa, general Vladimir Padrino López, por la actuación de la Policía y la Guardia Nacional Bolivariana, quienes se han ocupado de desprestigiar la imagen de estas instituciones.
“No puede ser que en todas las manifestaciones se repitan las agresiones por parte de los funcionarios, que han dejado a más de 60 personas asesinadas, y no se tomen medidas al respecto. Al ver este uso desproporcionado de la fuerza, pareciera que la orden no es dispersar a los manifestantes sino eliminarlos”, advirtió.
Insistió que todas estas malas prácticas, por parte de los funcionarios, representan una violación flagrante de los Derechos Humanos (DDHH) de los venezolanos; tanto con los mecanismos de represión, como los robos a los manifestantes.
“Los funcionarios deben recordar que la represión de fuerzas armadas del Gobierno es una violación grave de DDHH. Más allá de las detenciones arbitrarias, hemos observado cómo lanzan de manera indiscriminada gases lacrimógenos. No respetan los derechos de los venezolanos. No les importa, incluso, quitarles la vida”, condenó.
Finalmente envió un mensaje a todos los efectivos activos, a que respeten los procedimientos de control de orden público y tomen en cuenta los niveles de fuerza empleados contra manifestantes.
“Los mecanismos de dispersión y los procedimientos que se deben aplicar para el control del orden público no se están siguiendo; están siendo violados y por eso es que hemos visto la cantidad de venezolanos asesinados y heridos en las manifestaciones.
Las bombas lacrimógenas no deben ser utilizadas para causar daños, sino para dispersar. Cuando un funcionario lanza una bomba directo al cuerpo del manifestante, ésta se convierte en un arma letal.
Hay niveles de fuerza que deben ser empleados, el lanzamiento de bombas lacrimógenas es el cuarto nivel en estos procedimientos, hoy vemos cómo estos efectivos violan el debido proceso accionando sus armas contra un pueblo pacífico sin mediar palabras”, concluyó.