Un “juego” que se ha estado cobrando la vida de muchas personas, en su mayoría jóvenes adolescentes, tuvo sus inicios en Europa, específicamente en Rusia, allí se popularizó a tal punto que sobrepasó las fronteras y lamentablemente hoy en día es conocido en muchísimas partes del mundo.
Se dice que el nombre de este escalofriante invento hace referencia a los suicidios colectivos de algunas ballenas, que buscan la orilla para encontrar la muerte.
Aunque solamente dura 50 días, es algo que ha encendido las alarmas de autoridades, colegios, instituciones, barriadas, familias, entre otros (…) y esto no solo en los lugares donde se han registrados casos, sino en distintas partes del planeta, ya que la preocupación crece cada vez más por el miedo a que este feroz “reto” se pueda acercar a los seres amados y les invite a realizar diferentes pruebas, entre ellas, la última, considerada completamente siniestra, consiste en que los jugadores se quiten la vida.
Aunque hasta el momento no se tiene una cifra oficial de muertes que se le atribuyen a este desafío, se han comenzado a tomar medidas importantes para evitar que siga restando vidas y se propague aún más causando pérdidas irreparables en los hogares de cada nación.
¿A quién se le atribuye?
Según información de diferentes portales web, luego de realizar ciertas investigaciones, responsabilizan a un ruso llamado Philipp Budeikin, estudiante de Psicología que fue expulsado por su universidad quien dijo que su propósito era “limpiar a la sociedad” de quienes él consideraba seres inútiles.
Reglas mortales
Definitivamente se considera que hay quienes acceden a este macabro juego por curiosidad, otros por estar a la “moda”, pero también lo hacen quienes tienen una baja autoestima y se dejan influenciar fácilmente por otros, aunque ni siquiera los estén viendo, como es el caso, ya que acá se dan instrucciones por internet de alguien que se hace llamar “El curador” y quien accede debe rendir cuentas y mostrar prueba de cómo van cumpliendo con las reglas establecidas.
Entre ellas tenemos que les piden cosas como:
Escribirse ciertas letras en alguna parte del cuerpo con una cuchillo, ver películas de terror o sicodélicas pasada las 4:00 de la mañana, hacerse otro tipo de cortes en los brazos y enviar fotos, dibujar la ballena en un papel y posteriormente en su brazo, publicar frases en sus redes sociales, escuchar cierto tipo de música, hacerse un enemigo, hay unos desafíos que son cambiados depende del perfil del “jugador”, entre otros.
En Latinoamérica
Es una situación realmente seria que requiere de atención inmediata como ya se está haciendo, en todos los continente se ha evidenciado la llegada de este fenómeno, esto mantiene en completo vilo a muchos padres.
Hay casos reseñados en Brasil, Colombia, Chile, Argentina, México, muchos representantes han hablado, jóvenes que han tomado esta decisión de quitarse la vida han dejado mensajes que son completamente vinculados a “La ballena azul”.
Cabudare/Venezuela
El pasado martes trascendió que este reto cobró la vida de una adolescente de 15 años de edad a quien encontraron ahorcada en una habitación de su casa en Cabudare, con un cable de algún electrodoméstico.
Familiares contaron que ella había comentado la existencia de un juego pero quizá por desconocimiento no le prestaron más atención, ya que tampoco dijo el nombre del mismo, se le atribuye porque tenía varios cortes en sus brazos, además de una en forma de estrella en una de sus piernas.
Realmente hay una gran inquietud porque se ha escuchado de niños muy pequeños hablando sobre la ballena y diciendo que la han visto en las redes sociales.
Ballena Rosa, desafío positivo
Es importante atacar el problema, si surge lo negativo contraataquemos con lo bueno, es el caso de “La ballena rosa”, que aunque no existen, es el nombre a una iniciativa que surgió en Brasil en respuesta al funesto reto, que busca la vida y sigue el mismo esquema del otro pero con aplicaciones positivas como; ser generosos, hacer reír a otra persona, dar abrazos, ayudar en casa, fomentar la autoestima, ayudar a compañeros o hacer nuevos amigos.
La finalidad es demostrar que el internet puede llevar cosas buenas y los creadores invitan a compartir el amor entendiendo que todos pueden hacer cosas correctas en el mundo.
