Quienes este martes bajaban a Barquisimeto procedentes de El Manzano, Río Claro y puntos intermedios se encontraron una vez más con el paso de vehículos interrumpido en el puente Macuto.
Afortunadamente el cierre no fue provocado por opositores al Gobierno, como ocurrió hace dos semanas, y la protesta en esta oportunidad no fue muy extensa.
Aproximadamente a las siete de la mañana, un grupo de mujeres y hombres se ubicó en la cabecera sur del puente con bombonas vacías de gas doméstico.
Elena Mendoza, una de las amas de casa, refirió que tenían casi un mes esperando por el camión con los cilindros llenos y que el pasado fin de semana les anunciaron la llegada para el lunes, lo que no ocurrió.
“Y ayer nos vinimos otra vez con las bombonas y tampoco llegó nadie y por eso decidimos trancar para llamar la astención”, expresó.
Hasta las ocho y media el único camión que llegó fue uno de la Guardia Nacional con un piquete de uniformados que, afortunadamente, no lo hicieron en actitud agresiva sino de diálogo.
Luego de que el oficial que los comandaba se comprometió a llamar a la empresa para que les enviaran el gas a las familias, éstas se retiraron hacia “la pata del cerro” a esperar les cumplieran en esta oportunidad.
Mendoza dijo que, además de Macuto, las familias afectadas con el mal servicio de distribución del combustible hogareño son de El Roble, El Manzano y El Bosque.
Hasta las 9 de la mañana aún no había llegado el camión para reponer las bombonas vacías, mientras el piquete de la GN permanecía vigilante en el sitio.