El presidente de la Asamblea Nacional, diputado Julio Borges, rechazó este viernes los actos de violencia que se ha generado en los últimos días en el país, producto de la represión por parte del Gobierno a las protestas pacíficas.
“El mundo entero ha calificado a Venezuela como un país donde hay un golpe de Estado y donde no se respeta la Constitución en este momento”, sentenció.
En este sentido, el parlamentario enfatizó que el pueblo venezolano ha salido a protestar pacíficamente para que se cumpla la Constitución y se respeten los Derechos Humanos, que son violados diariamente por un régimen dictatorial.
Igualmente criticó la respuesta del gobierno ante las manifestaciones que se han suscitado mediante “la represión, la violencia y la muerte. El gobierno es el único que ha dicho que se está preparando para una guerra que no existe y es el único que ha hablado de armas, además ha activado planes como si el pueblo fuera enemigo”.
En otro orden de ideas, el jefe del poder legislativo nacional retó al Presidente Nicolás Maduro para que presente “un mejor plan para el país que las elecciones”.
En este sentido, aseveró que los venezolanos deben ser quienes decidan el futuro que quieren, puesto que, corresponde en esta crisis apelar a la voluntad y soberanía del pueblo.
“El voto es el objetivo de esta lucha, ese es el camino de la paz. Nosotros estamos en la calle, en la Asamblea Nacional, en todos los rincones de Venezuela por esta lucha. Queremos democracia y que se respete la Constitución”.
Torturas
Borges aprovechó la oportunidad para denunciar que el Secretario de Organización de Primero Justicia en el estado Táchira, Gustavo Gandica fue detenido y torturado con la presencia de un General de la FAN, asegurando que cada funcionario responderá personalmente por la violación de Derechos Humanos.
“Quiero responsablemente señalar al General Yánez Figueredo del estado Táchira quien estaba presente y quien incluso participó en este acto de tortura contra Gustavo Gandica. Estas violaciones de derechos humanos la pagarán porque no prescriben y porque son condenables en todas partes del mundo», finalizó.