Barquisimeto se ha convertido en un epicentro de batalla entre el pueblo opositor y los cuerpos de seguridad del Estado. El pasado lunes en diferentes puntos de Barquisimeto y Cabudare, se instalaron barricadas como forma de protesta para pedir un cambio de gobierno, lo que dejó un saldo de 48 detenidos y dos heridos de bala.
Sin embargo, las consecuencias no solo las sufrieron los manifestantes, las unidades de transporte al percatarse de las situaciones de disturbios y represión comenzaron a reformular sus rutas y horarios. En una visita de un equipo de reporteros de EL IMPULSO a las instalaciones del terminal de pasajeros de Barquisimeto, se pudo percibir la afluencia tan inusual de los temporadistas.
Trabajadores de la línea Expresos Mérida, que hace vida en dicho terminal, informaron que una de sus unidades que realiza la ruta para el estado andino sufrió daños en dos de sus ventanas, pues les fueron lanzadas piedras, lo que además dejó lesionado a un pasajero, y ocurrió a la altura de la catedral de la ciudad larense.
Un trabajador de otra organización aseguró que sienten temor no solo por los daños materiales -que cuesta mucho trabajo recuperar actualmente-, sino por la responsabilidad de la seguridad y protección de sus usuarios, choferes y colectores.
Luego de estos hechos, ésta y otras empresas de transporte decidieron finalizar la jornada unas horas antes para resguardar la integridad física de sus trabajadores y las unidades. Además de esto, no habilitaron las busetas en su totalidad disminuyendo el servicio prestado.
No obstante, a pesar de ser temporada de asueto por la celebración de la Semana Santa, el director del terminal de pasajeros de Barquisimeto, Luis Valencia, aseguró que el flujo de pasajeros ha disminuido entre un 35 y 40 % de lo acostumbrado en estas fechas.
Valencia explica que esto no solo se da por las manifestaciones, sino que la crisis económica que viven los venezolanos en el día a día, no permite el disfrute de los días feriados como se hacía anteriormente. Aunado a ello, informó que los choferes no están realizando las rutas largas, un ejemplo es del expreso antes mencionado, que en su ruta a Mérida la acortó hasta el Vigía.
“Todas las líneas están trabajando, pero no se encuentran en funcionamiento todas las unidades”, explicó Valencia. Además destacó que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB) han arremetido de una forma nunca antes vista.
Por último, el Sistema de Transporte Masivo de Barquisimeto (Transbarca) decidió suspender las rutas de Santa Rosa, Alí Primera, Cují Tamaca, La Carucieña Cabudare y La Piedad, para el resguarde de sus usuarios, transportistas y unidades. Pero el transporte urbano o Barquisimeto-Cabudare y viceversa trabajó con normalidad, solo tomando precauciones por si se repite esta situación. Se espera que aumente el flujo de temporadistas y disminuyan las protestas por los días de asueto.
