El coordinador de la asociación Defensa por los Derechos Civiles, Rafael Narváez, rechazó que el Contralor General de la República, Manuel Galindo, se sume al “esquema autoritario implementado por el Tribunal Supremo de Justicia, para amenazar con el uso de fuerza pública e invadir los espacios de la Asamblea Nacional”.
A juicio de Narváez dicha situación se corresponde con la instauración de un brazo político que tiene por objeto ejecutar todas las decisiones del Presidente de la República.
“Hoy se repite la historia que nos coloca en los tiempos de Fujimori en Perú o en la Venezuela de 1999 y 2000, cuando los parlamentarios nos encontramos con la Guardia Nacional armada hasta los dientes para impedir nuestra entrada al Parlamento”, indicó a través de una nota de prensa.
Quieren anular a la AN
El abogado y exdiputado calificó como un grave error que el gobierno nacional se empeñe en dejar de lado el contrapeso necesario en cualquier administración de Estado, al utilizar el máximo tribunal de la República para anular el Parlamento venezolano, a fin de mantenerse en el poder, mientras, un pueblo está en la calle hambriento, con desesperanza y sin encontrar medicinas ni salud.
“Nuevamente la Asamblea Nacional sufre un atentado, esta vez por parte del Contralor General de la República, Manuel Galindo quien al parecer ha sido designado para convertirse en un segundo Fujimori en Venezuela para cerrar la Asamblea Nacional”, enfatizó.
En cuanto a la reciente designación de Maikel Moreno como presidente del Tribunal Supremo de Justicia señaló que es una profanación a la ética y la conducta.
«Es inaceptable que un individuo politizado sea quien conduzca el máximo tribunal de la República, actuando como un simple operador para cambiar piezas políticas por complacencia, justo en un momento de tanta oscuridad y tinieblas en Venezuela”, remarcó.