Julián Castillo, Carlos González y Daniel Mora, integrantes del movimiento que acompaña a Richard Páez en su propósito de alcanzar la silla de la Federación Venezolana de Fútbol, denunciaron que en el caso de las elecciones a la asociación del estado Lara, fijadas para realizarse el venidero 6 de marzo, “se han cometido muchas irregularidades”, razón por la cual califican el proceso de “viciado” y advierten que en puertas está “un fraude”, en referencia directa a la persona que maneja actualmente los hilos del balompié crepuscular aficionado y que pretende extender un periodo más su presidencia.
Castillo es dirigente de la Liga Unión, González hace parte de la Liga Crepuscular y Mora participa con una comisión de fútbol sala y los tres apoyan las aspiraciones del ingeniero Wilfredo Sánchez, primer propietario del Unión Lara, de tomar las riendas de la asociación local.
La plancha encabezada por Sánchez debe postularse viernes o sábado de la presente semana, según establecen las reglas electores del ente federativo, “pero tenemos conocimiento de que hay presiones para que ni siquiera nos presentemos”, señaló Castillo, quien, aunque no aspira a cargo alguno, ofrece respaldo absoluto al otrora dueño del Unión Lara.
“Son muchas las irregularidades. Por ejemplo, existen 33 clubes registrados ante la asociación, pero algunos de ellos son fantasmas, nadie sabe dónde operan, si tienen jugadores, e igual tienen derecho al voto. Cuando indagamos, nos damos cuenta que se trata de gente allegada al actual presidente de la asociación. Eso no es justo y le da un carácter irregular al proceso”, añadió.
Indicó que “tenemos el respaldo de unos 18 clubes”, pero peligra la postulación de la plancha, porque “se necesita el 30 por ciento de respaldo del padrón electoral” para hacer efectiva la inscripción.
“No llegamos a ese 30 por ciento, porque son 31 manifestaciones de respaldo, y entre los demás votantes, entre entrenadores, jugadores, árbitros y fútbol femenino quizás no podamos conseguir, porque los están presionando para que no nos den su apoyo e incluso a algunos les prohíben hablar con nosotros”, denunció Castillo, sin dejar a un lado el hecho de que “la comisión electoral la eligió la asociación y esa es otra aberración”.