Nuevamente se toman acciones en cuanto a la economía informal ubicada en el centro de la ciudad. En esta oportunidad se busca reubicar los vendedores de frutas, verduras y hortalizas, así como también los de comida rápida y buhoneros que se encuentran en el casco histórico.
El jefe de la división de Mercado y Abastecimiento, Giomar Rojas, en declaraciones indicó que están realizando reuniones con representantes de este sector trabajador para poder ofrecerles un sitio en óptimas condiciones para sus labores sin obstruir el paso ni el embellecimiento de la ciudad. Indicó que desde inicios del año, se han realizado diferentes mesas de trabajos con estos vendedores encabezados por Dalia Reyes que es la coordinadora de este sector.
Rojas informó que hasta los momentos, la calle que se está tomando en cuenta para esta reubicación es la calle 22 entre carreras 20 y 21 por la amplitud de la misma, de forma que estén todos en una misma zona y así dar facilidad a los clientes de ubicar los productos ofrecidos. Esto se realizará luego de obtener los resultados de un censo que busca los datos exactos de cuántos puestos hay y tener un control de quienes se instalan en estos espacios. Actualmente no se permite a los vendedores de comida rápida utilizar toldos o sillas para mantener un poco el orden del casco de la ciudad. Por otra parte, las leyes no permiten que se les otorgue un permiso para ubicarse en cualquier zona de la ciudad, por lo que los trabajadores están exigiendo una reforma a esta ordenanza.
Destacó que el propósito de este proceso junto con el censo es el de mantener un control estricto de los vendedores que se instalen, de manera que sean los que trabajan durante todo el año y no los que lo hacen por temporada. En estos momentos se estiman un aproximado de 150 buhoneros ubicados en la avenida 20, mientras que en el año 2015 existía un estimado de más de mil, según Rojas.
Asimismo se busca controlar los impuestos que cancelan los mercados municipales al estado que actualmente es de 2 Unidades Tributarias (UT), por consiguiente se espera aumentar estas cifras para ser invertidas en las necesidades de la ciudad y la calidad de los trabajadores informales.