Siete pasajeros y el chofer de una buseta perteneciente a la Ruta 15 vivieron horas de terror, la mañana de este martes, cuando dos sujetos armados abordaron la unidad para secuestrarla, llevarla a un terreno baldío en Carorita Arriba y desvalijarla, mientras despojaban a las víctimas de todas sus pertenencias bajo amenaza de muerte.
Todo sucedió en cuestión de minutos, contó el conductor del vehículo a EL IMPULSO, quien prefirió mantenerse en el anonimato.
“Yo salí de La Ruezga para hacer mi recorrido normal y se montaron unos tipos en el Cinco de Pavia (…) Eran como las 6:00 de la mañana”, narró con tristeza.
Explicó que parecían personas normales, pero casi inmediatamente después de subir a la buseta indicaron que se trataba de un atraco y apuntaron al chofer para que cumpliera las órdenes. A los pasajeros los obligaron a meterse debajo de los asientos.
“Esto es un secuestro. Nosotros no queremos hacerles daño pero pórtense bien”, gritaron los hampones.
Exigieron tomar la avenida Circunvalación Norte y conducir a través de ella hasta una de las salidas hacia el barrio La Peña. Allí se desviaron para pasar por debajo de la misma autopista y tomar un desolado camino de tierra que conduce a Carorita Arriba.
Entre la vegetación xerófila y la basura, estacionaron la buseta en un sitio donde esperaban tres hombres encapuchados para entrar en acción. Los delincuentes prosiguieron su modo de operación bajando a los tripulantes de la unidad y haciéndolos alejarse unos metros del vehículo robado.
Sobre unas piedras
Mientras las víctimas del secuestro eran obligadas a dar la espalda al bus, los delincuentes quitaron los seis cauchos que estaban “en buenas condiciones”.
No satisfechos con ello, se hicieron con las herramientas del conductor para sacar batería, carburador, alternador, arranque y otras piezas del vehículo de valor considerable.
Al finalizar la extracción, aseguró la víctima principal, se fueron caminando por un camino de tierra cerro abajo.
Ellos quedaron inmóviles por unos segundos, a petición de los delincuentes, y luego caminaron hasta la Circunvalación para pedir auxilio.
La Policía del estado Lara llegó rápidamente al sitio del hecho para revisar las adyacencias, pero la búsqueda no dio resultado alguno.
El chofer denunció que los atracos en los autobuses afiliados a la Ruta 15 son constantes, por lo que hizo el llamado a las autoridades para que estén atentos.
Se vio obligado a buscar par de cauchos y una grúa para rescatar lo que dejaron de la unidad.