El vuelco y posterior explosión de una gandola cargada de combustible de Pdvsa, ocurrido el viernes en la avenida Ribereña cerca de la calle 45, al sur de la capital larense, aun con la magnitud del accidente no cobró vidas, pero sí alteró la cotidianidad de las familias residenciadas al borde de la vía por donde se desplazó el vehículo de carga pesada.
Ayer, aliviada la desesperación natural de ver cómo estalla el almacén de un carro con unos 35 mil litros de combustible y cómo en segundos las llamas se elevan a pocos metros de sus casas, a los habitantes de la zona los inquietaba la idea de saber que perdieron instrumentos de trabajo y objetos de uso imprescindible, pues el fuego los deshizo.
En una casa que hace las veces de taller mecánico y desde donde se ofrece servicio de auxilio vial estaban estacionados dos carros, una grúa marca Ford y un Chevy Nova. Ambos se quemaron. Con el primero la pérdida fue total y al segundo todavía le funciona el motor.
La grúa es propiedad de Wilmer León. Con el uso de ésta, aparte de los trabajos de reparación automotriz, gana la mayor parte del dinero con el que mantiene a su familia y la perdió, según la apreciación de León, por la imprudencia del conductor de la gandola Mack.
El afectado narró que la tarde este viernes acababa de estacionarse, acompañado por su hijo, al borde de la Ribereña cuando vio por el retrovisor que la gandola venía con exceso de velocidad en la curva, volcó, se derrapó unos 200 metros hacia donde él estaba y explotó. León se alejó raudo del sitio antes de que las llamas tocaran la grúa. Después regresó y aunque intentó apagar el fuego, no lo logró.
Al sitio, dijo, se presentaron representantes de Pdvsa y de la empresa de transporte contratada por esa compañía, pero ninguno dio respuestas concretas sobre la indemnización por los daños causados, pago que debe correr por cuenta de la estatal, pues, según León, el chofer además de conducir a una velocidad mayor de la permitida en la avenida Ribereña lo hacía ebrio.
“Necesitamos soluciones porque de qué vamos a mantenernos estos días”, solicitó.
Hoy llevará el vehículo a la sede de la Policía Nacional Bolivariana donde elaborarán el informe de las pérdidas y, luego, lo entregará en la planta de Pdvsa de Maporal.
En total, contaron los vecinos, fueron cuatro casas cuyas estructuras se maltrataron por las llamas. Entre estas, está la de Maura Rivero. En el momento del accidente solo se le ocurrió sacar dos bombonas de gas y correr cerro arriba.
Ella perdió la ropa que tenía en el frente de la casa bajo el sol mientras se secaba, parte de los utensilios de cocina, la tubería de agua blanca de la cocina y la antena de televisión. Madre e hija quedaron sin uniformes para trabajar e ir a clases y carecen de recursos para recuperarlos pronto.
Inician investigación
Pdvsa a través de la filial Pdvsa Empresa Nacional de Transporte, S. A. informó en un breve comunicado de prensa que por el “evento no deseado” se activó el plan de emergencia y el comité de investigación causa raíz.
Presentaron disculpas ante la colectividad por lo sucedido y afirmaron que la distribución de combustible está garantizada para todo el país.