Desde hace tres semanas los estudiantes de la Universidad Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo) han tenido que hacer malabares para lograr cumplir con sus prácticas, pues no cuentan con el servicio de gas, elemento sumamente necesario para hacer sus respectivas asignaciones.
Aniello Rizzo, jefe de sección de los laboratorios de ingeniería química, explicó que son cuatro las bombonas de 45 kilogramos con las que se cuentan para surtir a cinco laboratorios.
Desde hace dos años el servicio ha dejado de recibirse de manera directa y esto ha obligado a docentes y estudiantes a buscar la forma de conseguir las bombonas, incluso, esto ha sido causal de protesta en anteriores oportunidades.
“Debido a la deficiencia que tenemos hemos ido directamente con las bombonas a comprar el gas y aún así nos dicen que no nos pueden vender, que eso es ilegal”.
Y es que no se trata de cualquier cosa, sino del gas que es necesario en al menos el 80% de las prácticas.
Entre 300 y 400 estudiantes se están viendo afectados y deben hacer uso de mantas de calentamiento para sustituir el fuego proporcionado por el gas.
“Las hemos usado porque es la solución más próxima pero son artefactos que ya están cerca de acabar su vida útil. De 15 están solo 10 en funcionamiento”, señaló Rizzo, a la vez que destacó que actualmente es cuesta arriba comprar estas maquinarias debido al alto costo y el bajo presupuesto.
“Sí, se han suspendido prácticas”, aseguró el profesional de la educación, quien lamentó que se deba llegar a dichas instancias, sin embargo conoce que ahora el problema con el compuesto es peor y esto se evidencia cada día en las calles de la ciudad con las constantes protestas.
No solo de gas
El déficit que hay en la Unexpo no se trata solo del compuesto; los estudiantes deben autofinanciarse y comprar diferentes elementos a usar durante las prácticas para no perderlas.
“Aquí necesitamos agua destilada, hace dos años se dañó la máquina e iban a dar un dinero, este se devaluó, hubo problemas para comprarla y ahora no se tiene”. Esto ha provocado que los universitarios destinen al menos 2.800 bolívares para la compra del mismo.
Como estas, son muchas las necesidades que se tienen, algunas a un nivel mayor para las cuales necesitan de presupuestos justos que permitan cubrir una educación de calidad.