Escasez de repuestos, aditivos y otros artículos encarecen el mantenimiento y reparación de vehículos y lo convierte en un “dolor de cabeza”.
Desde 2015 el sector automotriz e importador de repuestos no es llamado a subasta de divisas del gobierno, sumado a que esta última no fue plenamente liquidada.
El cierre de frontera taponó una pequeña válvula de escape y aunque el paso por Colombia fue reabierto, según cuentan representantes del gremio, el ingreso de autopartes a Venezuela se ha mostrado sumamente restringido, a diferencia de lo que ocurre con los alimentos.
Alí Almao, presidente de la Cámara de Importadores de Repuestos Automotrices de Lara (Cidralara), refirió que el 80 % de las 12.000 piezas que pueden componer un carro son importadas y al no contar con divisas para la adquisición de las mismas en el exterior, el sector se encuentra de manos atadas.
– Antes la variedad era parte de nuestro servicio. Ahora para subsistir nuestro afiliados se han vuelto especialistas en partes o marcas, es decir en una marca de vehículo o venden todo para el tren delantero, por ejemplo. Anteriormente no era así, todos vendíamos de todo y los clientes no tenían que buscar en muchos lugares.
Explicó que lo poco que ingresa a Venezuela se hace por “pulmón propio” y a tasa del Sistema Marginal de Divisas (Simadi), que pasó a llamarse Divisas Complementarias (Dicom) o flotantes, aunque este sistema no se ha activado. No todos tienen acceso a esta tasa.
Sostuvo que obtienen las divisas a través de casas de cambio o establecimientos autorizados, pero el procedimiento es limitante, por lo que el comerciante no termina por abastecer su stock de repuestos. “Las divisas no fluyen”, expresó.
A esto añadió que Bs./$ 600 aproximadamente encarece aún más la oferta de repuestos, lo cual es criticado por la clientela.
Solicitó a la población estar atentos ante los elevados costos. Subrayó que si bien en algunos lugares se trata de precios especulativos, no apegados a la realidad, también se ofertan en el mercado repuestos con precios muy por debajo de la media de mercado, pero esto es así porque se trata de imitaciones de poca calidad, con lo cual las personas corren riesgo de fallas. Insistió que en el mercado hay en oferta “mucha imitación barata de repuestos”.
Almao pidió estar atentos a los tipos de repuestos que se adquieren y a acudir a establecimientos reconocidos o de confianza.
El sector repuestero del país debe atender un universo automotriz de 4.500.000, entre vehículos nuevos y usados, los cuales en su mayoría demandan repuestos y otros.