La campaña de Hillary Clinton presionó el domingo al director del FBI James Comey para que revele detalles de los correos electrónicos que según él podrían estar relacionados con el uso de un servidor privado por la candidata, y si el propio Comey los ha revisado.
Tim Kaine, el compañero de fórmula de Clinton, dijo que Comey tenía el deber de informar al público sobre los correos que están siendo revisados por el FBI cuando restan apenas 10 días para la jornada electoral del 8 de noviembre. El mensaje de Kaine era una respuesta al candidato republicano Donald Trump, quien ha aprovechado la controversia para sembrar dudas sobre la confiabilidad de Clinton.
«Por lo que sabemos al presente, el director Comey no sabe nada sobre el contenido de estos correos. Ni siquiera sabemos si son de o a Hillary», dijo Kaine. El senador por Virginia añadió que si Comey «no ha visto esos correos, quiero decir que deben aclararlo. Entonces deben abocarse a leer esos correos y dar a conocer las circunstancias una vez hecho el análisis».
El jefe de campaña de Clinton, John Podesta, dijo que Comey manejó el asunto de manera «inapropiada». Podesta exhortó a Comey a ser más transparente porque la revelación se produjo «en medio de la campaña electoral tan cerca de la votación».
Clinton, en una iglesia negra en Fort Lauderdale, Florida, no mencionó directamente la investigación del FBI pero recordó que la Biblia dice que «el sufrimiento genera fortaleza, y la fortaleza forma carácter, y el carácter produce esperanza».
Las medidas de Comey el viernes agitaron la campaña, dieron nueva energía a Trump cuando caía en las encuestas y alteraron los nervios de los demócratas preocupados por la presidencia y otras candidaturas.
El FBI investiga si había información secreta en una computadora de Anthony Weiner, un ex legislador caído en desgracia que está separado de Huma Abedin, una colaboradora estrecha de Clinton. En carta al Congreso el viernes, Comey dijo que el FBI había descubierto nuevos correos cuando investigaba un caso no relacionado con el de Clinton y estudiaba si había información secreta en ellos.
El equipo de Clinton y varios dirigentes demócratas aparecieron en los programas periodísticos del domingo para decir que semejantes declaraciones del FBI poco antes de una elección no tenía precedentes.
Su campaña ha presionado a Comey para que divulgue todos los hechos conocidos y ha criticado su carta porque carece, dicen, de detalles cruciales.
La jefa de campaña de Trump, Kellyanne Conway, dijo que Comey estaba en «una situación insostenible» cuando reconoció que el FBI estudiaba los mensajes. «Si hubiese ocultado la información, se podría argumentar que también interfería con la elección, dijo Conway.
Entretanto el domingo Donald Trump inició el día con un servicio religioso en una iglesia ecuménica en Las Vegas.
Trump aplaudió y se meció al ritmo de los himnos en la International Church of Las Vegas. Los feligreses estaban de pie, cantando y bailando al compás del coro y su banda.