El Gobierno sigue diseñando medidas erradas que no atacan la crisis desde lo medular. Obligar a los productores a destinar el 50 % de su mercancía al sector público no será una solución cada vez que la oferta del mercado siga siendo menor a la demanda. Contrario a una garantía de soberanía alimentaria es una intensificación de las disposiciones discriminatorias que ponen la necesidad de unos venezolanos sobre otros, a pesar de la declaratoria del artículo 21 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (CRBV), el cual expresa que todos los ciudadanos son iguales ante la ley.
Tal aseveración fue realizada por Roberto León Parilli, presidente de la Alianza Nacional de Usuarios y Consumidores (Anauco), quien sostiene que el Gobierno sigue errando en sus políticas y violando derechos fundamentales de los venezolanos.
En opinión del especialista, la estratégica gubernamental debería estar enfocada en impulsar la producción nacional para así generar oferta. Sostiene que si el propósito del Gobierno es respaldar a las clases desfavorecidas, entonces podría aplicar, de manera planificada, subsidios directos que no impacten sobre el industrial o comerciantes.
-Pero el Estado se ha convertido en un Estado empresario, que ha fallado en sus intentos de controlar la economía del país. Un ejemplo son los abastos y la red pública creada en torno a estos, lo cual es muestra de su fracaso.
Indicó que la reciente disposición gubernamental que dispone el 50 % de la producción para el sector público, es un “experimento” que sólo concentrará en manos de un sector informal la poca producción del país.
-No es que desee que no funcione. Ojalá y sí. El problema es que su diseño es errado… El problema no es la distribución, sino la producción. El ciudadano debe encontrar la comida en los anaqueles, no en bolsitas.
León Parilli rechazó que se pretenda sustituir la economía formal, generadora de bienes, trabajo y pagadora de impuestos, por una economía de guerra y de estado de necesidad que distribuye alimentos a través de medios, personas y espacios inadecuados
Asimismo, condenó que aspectos señalados como delito en el pasado, los cuales fueron excusa para satanizar y culpar a los empresarios de la “guerra económica”, actualmente sean ejercidos y anunciados por representantes del gobierno con ligereza, como el gobernador del Táchira, José Vielma Mora.
Citó las acusaciones de dolarización del mercado y de marcaje de precios por encima del importe impuesto por el mismo Gobierno, lo cual es contrario a la actual introducción permisiva de artículos a precio internacional en el mercado nacional. Manifestó que el Ejecutivo nacional sigue marchando sobre la improvisación.
