Luego del fotorreportaje que publicó The New York Times sobre las condiciones de los pacientes del Hospital de Resocialización Psiquiátrica El Pampero, este jueves el director regional de Salud, Ruy Medina, visitó las instalaciones a fin de realizar un informe sobre las fallas.
Dijo que la situación actual no es tan dantesca como se pintó y que sintió complacencia de ver El Pampero limpio y aseado. “Los pacientes hospitalizados aparentemente están en buenas condiciones porque los vi caminar y moverse, no estoy diciendo mentiras, yo no acostumbro a eso”.
Al consultarle sobre las fallas en la alimentación de los 64 pacientes que reiteradamente han denunciado los trabajadores del hospital, dijo que vio pollo en suficientes cantidades y otros que estaban descongelando para la cena de ayer, había ensalada, arroz y jugo. “Me llevaron en donde está la cava y me mostraron que había pollo para viernes, sábado y domingo, para la semana que viene habrán tomado previsiones”.
Sobre las fallas que observó en el psiquiátrico enlistó: el suministro irregular de agua por parte de Hidrolara y algunas fallas de luminaria en un sector, la licuadora industrial está dañada al igual que la rebanadora de papa, el personal también se quejó porque solo tienen disponible una lavadora pequeña para lavar la ropa de los pacientes. “Todo lo tengo anotado para presentárselo al gobernador Henri Falcón”.
Dijo que un especialista en psiquiatría está evaluando a los pacientes dos veces por semana, pero aseguró que en El Pampero no es indispensable el psiquiatra.
-La sencilla razón es que los psiquiatras son para pacientes recuperables, para quienes por alguna razón orgánica o de otra naturaleza pueden ser recuperados a la sociedad, los que están allí (en El Pampero) no son pacientes que se puedan recuperar, están muy deteriorados y eso no es culpa de nadie, sino de la enfermedad.
Periodistas necesitan autorización
Ruy Medina también dio la orden de prohibir la entrada a El Pampero a los periodistas que no tengan autorización.
-Vamos a hacer las cosas como deben ser, no voy a ocultar si hay deficiencias, yo muestro y digo la realidad, pero no quiero que se siga sacando solo lo malo sin decir las cosas buenas. Si los periodistas quieren ir a El Pampero, van conmigo.