Largos minutos de terror, que se prolongaron por el resto de la noche del jueves y parte de la madrugada del viernes, vivieron numerosas familias de los sectores Reinaldo Martínez y Getsemaní, al este de Quíbor, cuando sus casas fueron inundadas por las aguas desbordadas de la quebrada vecina, dejando saldo de 50 afectadas y 7 damnificadas.
“Eso fue terrible; eso era mucha el agua que entró de repente a las casas; los niños decían llorando: mamá, nos vamos a ahogar?, y uno les consolaba y aseguraba que no porque Dios estaba con nosotros”, contó Marlene Colmenares este viernes, aún sin terminar de retirar el agua y barro que dejó el desbordamiento de la quebrada.
Como ella, muchas de las familias de la comunidad seguían en esa labor.
Noelis Martínez, los Pérez Pérez, los Hernández Mendoza, Johnny y Joana, los Torrealba, Yasmira Galíndez, Danny Torrealba y otros pasaron toda la noche sacando agua y barro de habitaciones, cocina, baños, patios y frentes de sus casas.
Pero un vecino al que sólo conocen como “El Cabo”, no podía hacer lo mismo pues su humilde casita de adobes se vino abajo por completo, mientras que una vecina, propiedad de alguien conocido coimo “Jaimolibre”, se cayó una parte.
Yasmira Galíndez contó que los momentos que vivieron no los olvidará nunca pues, aproximadamente a las 8 de la noche, de pronto, se percataron de que el agua llegaba al patio y, muy rápido, penetró a la vivienda, obligándoles a colocar en partes altas colchones, muebles, estantes y hasta la nevera, como debió hacerlo Johnny Hernández, quien la mañana de este viernes seguía limpiando su refrigerador para luego prenderlo y constatar si no se había dañado.
Noelis Martínez también refirió que “eso fue de pronto, muy rápido , por lo que no tuvimos tiempo suficiente para salvarlo todo pues el agua entraba por un lado y salía por el otro, llevándose ropa, artículos de cocina y muchas cosas de la casa”.
Otros de los vecinos afirman que la corriente también arrastró varios animales domésticos, concretamente pollos.
“Aquí lo que hace falta es que la alcaldía contrate una máquina para canalizar la quebrada, porque el alcalde anterior nunca lo hizo y, además, no sabemos que hizo con los tractores que tenía”, declaró Isabel Rodríguez, vecina.
Agradecieron la actuación, la misma noche del jueves, de personal de Protección Civil y de los Bomberos, pero estaban esperando una visita del alcalde José Martín o de algún funcionario de la alcaldía para determinar las ayudas que podrían prestarle.
Quien sí hizo un recorrido por el sector fue la diputado suplente a la AN, Ana Salas, quien ofreció gestionar ante la diputado Carmen Meléndez ayuda para las 50 familias afectadas y 7 damnificadas.
“Lo primero que pedimos es la canalización de la quebrada, o al menos que la limpien para que, cuando llueva, el agua pueda correr libremente y no se represe como ocurrió anoche”, dijo una vecina.
Otra le exigió terminen de construir 15 casas del sector, iniciadas hace varios meses, las cuales están necesitando las familias a quienes les derribaron las suyas con la promesa de darles unas nuevas.
