De nueva cuenta el Cuerpo de la Policía del Estado Lara acapara los reflectores de la entidad hacia su interior, pues otros cinco funcionarios de dicho ente de seguridad fueron aprehendidos en flagrancia extorsionando.
El procedimiento fue realizado, durante la tarde del martes, por castrenses del Comando Nacional Antiextorsión y Secuestro (Conas) de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), quienes intervinieron en la entrega controlada que cuadró la pareja de la víctima con los policías.
El secuestrado se encontraba en su puesto de venta de verduras y hortalizas, ubicado en la avenida Venezuela con calle 37, cuando dos efectivos se le acercaron y lo obligaron a montarse en un vehículo color azul, que se presume sea propiedad de uno de los autores del delito.
En el carro lo “ruletearon” un buen tiempo y, a eso de las 12:00 p.m., se comunicaron con la esposa del individuo para pedirle el desembolso de 500 mil bolívares por su libertad.
Sin dudarlo, la esposa del comerciante informal se dirigió hasta la sede del Conas para denunciar lo sucedido e inmediatamente entró en acción una comisión que, en poco más de una hora, orientó para pautar el pago del rescate, logrando bajar la suma de dinero a Bs. 80 mil.
El punto acordado fue la avenida Vargas entre calles 27 y 28. A este se apersonaron los uniformados a bordo de un camión blanco marca Jac, de uso oficial, en el que tenían sometida a la víctima.
La Fiscal Cuarta del Ministerio Público, Yaritza Berrios, y los efectivos del Conas solo esperaron que, aproximadamente a las 3:00 p.m., se consumara la entrega para capturar, sin resistencia alguna, al supervisor en jefe Luis Franco, el oficial en jefe Rubén Rodríguez, el supervisor Antonio Dorante, la femenina Audimar Montes y el oficial José Portillo, todos destacados en el Centro de Coordinación Policial (CCP) Metropolitano.
La víctima no presentó antecedentes y presuntamente no quiso cancelar una especie de vacuna de 10 mil bolívares que le cobraron los oficiales, lo que desencadenó un accionar más radical.