Profesores de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Central de Venezuela, núcleo Barquisimeto, representantes de la comisión de educación y cultura del Concejo Municipal de Iribarren y de la empresa privada debatieron opiniones sobre los proyectos existentes para el cementerio Bella Vista y para recuperar la utilidad del terreno que abarca desde la pared de entrada del camposanto hasta la acera de la 42, espacio correspondiente a una alameda.
Los expertos coinciden en la idea de convertir el cementerio en un museo a cielo abierto por su indiscutible valor histórico. Allí se alzan imponentes esculturas de los siglos XVIII y XIX traídas de Italia, posee una estructura poco común que combina tumbas, capillas, panteones y criptas donde reposan los restos de próceres larenses y familias relevantes de épocas pasadas, enumeró la arquitecto Ingrid Regalado.
Todo el contenido reúne las condiciones para ser transformado en museo como los existentes en París, Medellín, La Habana o Buenos Aires, donde los camposantos forman parte del recorrido histórico turístico, tal como lo ejemplificó la profesora Claudia Rodríguez.
Los desacuerdos aparecen en la utilidad que se le dará a la alameda, también conocida erróneamente como plazoleta. En un proyecto presentado por la empresa 439 Estudio, contratada por la Alcaldía, se plantea incluir una estación de transferencia de transporte público y antes también incluía áreas para comerciantes.
La idea de incluir la dinámica del transporte público, de acuerdo a la perspectiva de los especialistas de la UCV, no encaja con la esencia de la alameda, porque “es un espacio de transición necesario entre la dinámica de la ciudad viva y la tranquilidad del cementerio, que es la ciudad muerta. Entonces, ese espacio de transición debe mantenerse como tal, como un espacio que baje las revoluciones de la vorágine de la ciudad para poder entrar al remanso del cementerio”, explicó Rodríguez.
La alameda, completó Rodríguez, debe ser un espacio público con características modernas y adaptado a la dinámica de la ciudad. En conjunto con el cementerio sería un espacio útil para actividades tanto educativas, de recreación familiar, turísticas y culturales. Si también se arboriza como los parques, se sumaría un pulmón vegetal necesario para la urbe.
Debates como el concretado este martes se prevé sea repetido en mesas de trabajo entre los expertos de la universidad, las instituciones públicas que preservan el patrimonio cultural, las asociaciones civiles y la comunidad del sector Bella Vista para propiciar intercambios de ideas, reunir las mejores características de cada proyecto y presentar a la Alcaldía una alternativa de cómo debe intervenirse ese espacio, sin estropear el patrimonio cultural.