Guaros de Lara, en la Liga Nacional de Baloncesto, inició fuerte, pero al llegar a los playoff comenzó a diluirse lentamente, debido a las múltiples imprecisiones ofensivas que supo aprovechar Broncos de Caracas. El equipo de casa cumple la mitad de sus objetivos esperados, obtiene la clasificación a la Copa Sudamericana, pero erra en alcanzar el tercer título seguido de la franquicia.
La historia del equipo comienza con una sólida ronda regular, que fue un paseo a excepción de los partidos ante Broncos, con los que quedaron igualados en el récord 21-3, pero por diferencia de apenas dos puntos los capitalinos lo aventajaron en la tabla general.
Esa pequeña distancia en puntos fue la diferencia para iniciar una hipotética seria final en casa de los equinos, que le dieron un paseo a Aragüeños BBC, al barrerlos 3-0. Caso contrario con Guaros que sufrió más de lo debido ante Cangrejeros de Monagas, al que superaron con un peleado (3-2).
Esta ronda final inició en la capital y pintaba como una de las series más parejas de la historia del torneo. Ante la situación, el equipo larense hizo dos adiciones (Juan Herrera y Jesús Centeno) que podían hacer la diferencia, pero la historia fue distinta.
El sistema de rotación de jugadores que le había dado tanto resultados al técnico Yonaiker Ecker no parecía servir ante los capitalinos, que tenían al experimentado Nestor “mamá osa” Salazar, que no le daba mucho descanso a sus estelares.
La serie empezó con una derrota ante los capitalinos 85-75, debido en gran manera a las 20 pelotas perdidas por el elenco guaro, que no pudo parar al tridente conformado por Axiers Sucre, Kevin Foster y Jordan Zamora, que eran efectivos de corta, media y larga distancia.
El único triunfo crepuscular llegaría en el segundo de la serie 79-65, gracias a los cinco triples de Pedro Chourio y los 16 contables de Juan Herrera, con una defensa muy ordenada que paró en seco las malas intenciones capitalinas.
Con la serie igualada, el Domo Bolivariano de Barquisimeto y su público podían hacer la diferencia, sumado a que Guaros no había perdido dos juegos seguidos como locales en todo el torneo.
En Barquisimeto, Broncos tenía todas las de perder al no contar con su estrella Axiers Sucre, con esa situación comprometedora, Tulio Cobos (más valioso de la final) emergería como el alma del equipo al sobrepasar sus habituales habilidades.
En el primer cotejo dominó debajo del tablero en los rebotes y le agregó a su arsenal un buen tiro de larga distancia. Zamora ayudó en el cierre para doblegar a Guaros (74-83). Del equipo crepuscular solo se destaca Kenji Urdaneta.
Ni el ánimo del triunfo en el mundial de clubes del equipo principal le dio fuerza a los locales, que vieron en Cobos a su verdugo (27 puntos, nueve rebotes) para caer 96-107, en ese partido Herrera fue sólido por Lara (26 contables).