Los rectores del Consejo Nacional Electoral no han discutido “ninguno de los aspectos medulares de la recolección de manifestaciones de voluntad de 20% de los electores”, paso que activa el referéndum revocatorio, reveló una fuente del organismo, reseña El Nacional.
Los puntos no se han tratado a pesar de que el jueves la Junta Nacional Electoral, integrada por las rectoras Tibisay Lucena (presidente del CNE), Socorro Hernández y el suplente Carlos Quintero, entregó el informe sobre las condiciones del 20%, documento en el que la instancia no cede ni un milímetro ante las exigencias de la Mesa de la Unidad Democrática.
El informe, al que tuvieron acceso técnicos de la MUD, propone que la recolección se haga con 5.392 máquinas de votación, en lugar de las 19.500 que pidió la oposición.
El texto debió aprobarse ayer, pero el organismo difirió su discusión para el lunes, pues considera que las protestas de opositores de ayer representaban una amenaza para sus trabajadores.
¿Dónde? La cantidad de máquinas y otros aspectos del informe han generado diferencias entre los rectores. Una de ellas tiene que ver con que el documento no respeta la distribución poblacional en la definición de criterios de ubicación de las máquinas.
“La mayoría de las máquinas están ubicadas de forma desproporcionada en cuanto a los electores. En ocasiones las máquinas de las zonas más pobladas son menos que las de zonas menos pobladas”, explicó Vicente Díaz, representante de la MUD ante el CNE que pudo revisar un borrador de la propuesta.
Díaz destacó que es exagerada la cantidad de máquinas que se propone colocar en los barrios del norte de Caracas y en el extremo sur-oeste de la ciudad, mientras que hay muy pocas en los alrededores de las principales vías de comunicación.
“Debería haber más máquinas, por ejemplo, en los liceos Gustavo Herrera, Andrés Bello o Fermín Toro, en la avenida San Martín, en El Valle, Santa Mónica y la avenida Victoria, donde está la mayoría de los electores del municipio Libertador. En el Polideportivo de El Hatillo, uno de los centros más grandes, no hay ninguna, lo que es un contrasentido, y hay muchas en los barrios y zonas rurales. La situación se repite en Valencia, Maracaibo y Barquisimeto”, afirmó.
¿Cuánto? Aunque el documento no establece que en la recolección se debe exigir 20% de firmas por estado, la cantidad de máquinas por utilizar se calculó para 20% de los electores por entidad. Exigir un porcentaje mínimo de firmas por región es algo que no ha sido aprobado por los rectores y es uno de los temas que genera diferencias (no solo se opone Luis Emilio Rondón).
“Piensan aprobar que el 20% sea por estado, la cantidad de máquinas sería inferior a las requeridas y los centros donde se realizará el proceso estarán ubicados en zonas de poco acceso y donde el oficialismo ha sido favorecido”, confirmó Jesús Torrealba, secretario ejecutivo de la MUD.
En el informe también se asume que la recolección de firmas se haga entre el 29 y el 31 de octubre, a pesar de que la oposición ha reiterado que se puede hacer a finales de este mes.
La MUD no ha determinado cuánta gente podrá manifestar su voluntad con esas 5.392 máquinas. Bello explicó que el documento calcula la misma cantidad de tiempo por elector que se requirió en la recolección de 1%, pero aclaró que esta vez demorará más porque este proceso tiene una nueva etapa: los ciudadanos deben colocar sus datos en un cuaderno.
Fuentes de la alianza afirman que al calcular el promedio de tiempo que demoró cada elector en el 1%, con 5.392 máquinas podrían manifestar su voluntad alrededor de 4,2 millones de personas (casi 300.000 más de las necesarias). Otros, más optimistas, aseguran que podrán hacerlo más de 6 millones.
¿2016? Bello aseguró que al no discutir el informe ayer el CNE aumentó a 122 los días de atraso que lleva el proceso, pero confió en que, a pesar de eso, puede hacerse este año.
Juan Carlos Caldera, también representante de la MUD ante el Poder Electoral, coincidió: “La insólita suspensión del directorio en modo alguno debe afectar que el revocatorio se haga en 2016. Esto no es un problema de lapsos, tiempo hay, lo que no hay es voluntad política del gobierno”.
Incluso si la recolección se hace a finales de octubre y a mediados de noviembre se convoca la consulta –como sugirió Lucena– el referéndum puede hacerse a mediados de diciembre: técnicos de la MUD han insistido en que un mes es más que suficiente para organizarlo.
Bello aseguró que inmediatamente después de la recolección, sea en el mes que sea, la oposición saldrá a las calles a exigir que se convoque inmediatamente la consulta.