Panes enriquecidos serían la válvula de escape. Ante el anuncio del superintendente William Contreras, referido a los precios del pan francés (Bs./u 50), pan canilla (Bs./u 100) y pan campesino (Bs./u 180), representantes del sector sostienen que el pan venezolano requiere de ingredientes de difícil acceso en el mercado, lo que actualmente eleva los costos. Sin embargo, el gremio mantendrá una variada oferta que permita a la clientela elegir entre precio y calidad.
Fernando Moreira, presidente de la Asociación de Panaderos de Lara, refirió que los números “fantásticos” señalados por las autoridades en la materia “no son muy prácticos”, ni se ajustan a las realidades de las panaderías. Si bien el Gobierno nacional ha trabajado para mantener las panaderías abastecidas de harina de trigo, este no sería el único ingrediente en crisis. La margarina, manteca y azúcar, por mencionar algunos, son esenciales para la elaboración de panes salados, no obstante se encuentran escasos, al menos en el mercado formal.
Adquirirlos en el mercado negro, comenta, “golpea” fuertemente sus estructuras de costos y aunque intentan palear gastos de múltiples maneras, los costos derivan en los actuales precios del mercado. Un pan francés, por ejemplo, se vende en Barquisimeto entre Bs. 100 y Bs. 150.
En este sentido, Moreira detalló que un kilogramo de margarina, producto necesario para lograr panes suaves, esponjosos y duraderos, registra un costo oficial de Bs. 1.500, pero en el mercado negro se paga en Bs. 4.000. El saco de azúcar de CVA, producto que también se emplea para panes salados, el cual reciben menos del 5% de las panaderías barquisimetanas, se comercializa en Bs. 36.000, mientras que en el mercado informal deben adquirirlo hasta en Bs. 120.000.
El llamado del gremio a las autoridades es para mediar no sólo en la distribución de la harina de trigo, sino también de ingredientes como los antes mencionados, a fin de que el valor de los productos en los mercado especulativos no afecte en la elaboración de pan, producto que ha tomado fuerza en la mesa del venezolano.
Regulado y enriquecido
Moreira detalló que los precios actuales son propios de los panes enriquecidos, los cuales se mantendrán en el mercado.
Los valores referidos por el superintendente Contreras, corresponderían entonces a un pan regulado, cuya preparación sólo constaría de agua, harina, sal, azúcar y levadura. La calidad del producto, a la cual están acostumbrados los venezolanos, disminuiría.
“Estos panes se debe comer al momento, sino pierden sabor y se ponen duros”, señaló.
El pan enriquecido consta entonces de huevo, harina, levadura, margarina y azúcar.
Precios de la harina
Moreira manifestó que las panaderías reciben sacos de harina de precios variados.
Barquisimeto, por ejemplo, es abastecida por molinos como Monaca, Molvenca, La Lucha y Cargill. La primera entrega el producto a un valor regulado de Bs. 7.000, mientras que la última lo comercializa a Bs. 12.500.
Manifestó que dicha variación también afecta sus costos. Asimismo, dijo no comprender la razón de una diferencia superior al 60%, ya que el trigo proviene de la misma importación, operada por el Gobierno Nacional.
Monaca sólo abastecería el 15% de las panaderías barquisimetanas, con código de la Superintendencia Nacional de Silos, Almacenes y Depósitos Agrícolas (Sada).
Las panaderías artesanales, serían aún más afectadas, ya que deben pagar precios aún superiores a los señalados.
No esperan cierres
A pesar de las constantes inspecciones realizadas por la Superintendencia para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde) a panaderías y los recientes precios anunciados, Moreira manifestó que al menos en Lara, los panaderos seguirán ofreciendo alternativas y buscando paliativos a las crisis económica.