Los Comités Locales de Abastecimiento y Producción, nombre que le otorgó el mandatario nacional, el pasado mes de abril al programa para abastecer a los Venezolanos con productos alimenticios, fue creado con la función de eliminar las colas en los supermercados y acabar con la llamada guerra económica.
Los CLAP están integrados por representantes de las UBCH, y consejos comunales. Sin embargo, habitantes de Palavecino se quejan porque van dos meses y medio que no reciben dicho beneficio.
La señora Maritza Bonito, habitante de Palavecino, hace un llamado al Presidente de la República con el motivo de obtener alguna explicación acerca de los CLAP.
“Pase por Palavecino y vea la cantidad de personas que han bajado de peso debido a la falta de comida”, acotó.
Hizo énfasis en que debería existir una mejor organización y la entrega de mayor cantidad de productos, ya que los recibidos no son suficientes para subsistir los quince días reglamentarios para recibir nuevamente los rubros.
La educación es otro problema que afecta a los larenses. Los colegios aumentan y es casi imposible pagar la matrícula con un sueldo mínimo.
Como consecuencias, padres se han visto en la obligación de retirar a sus hijos de las instituciones, no tienen como costear los gastos, entre transporte y todo lo necesario para la formación académica.
Los desmayos han sido una consecuencia por el desabastecimiento, niños han dejado de asistir a clases por no tener qué comer en su casa, e incluso siendo retirados de las escuelas.
Bonito comentó que institutos privados no reciben ayuda, con respecto a útiles escolares, tabletas, uniformes, ni computadoras.
Exige a la directora de la Zona Educativa que les ofrezca algún beneficio, los representantes tienen que velar por la educación de sus hijos y no poseen los recursos necesarios.
Aseguró que la calidad de educación ha desmejorado. Niños han bajado el rendimiento académico debido a las necesidades que padecen. No hay cupo en escuelas ni liceos públicos; todos se encuentran totalmente abarrotados.