Aunque pareciera la sala de exposiciones de un museo, o el santuario de un santo venezolano, no es otra cosa que uno de los salones del comando de campaña del candidato a la presidencia, Henrique Capriles Radonski, donde se puede apreciar todos los regalos que ha recibido durante su campaña.
Las paredes están forradas de todas las curiosidades que le han entregado en este largo camino que ha recorrido por Venezuela, se aprecian sombreros, rosarios, collares, fotografías, afiches, cartas, cuadros con su retrato, autobuses del progreso, estampitas de todas las vírgenes, donde no podía faltar la patrona del estado Lara,La Divina Pastora.
Es un recinto de fé y confianza donde se encuentran depositadas las esperanzas de muchos venezolanos, quienes ven en este candidato la opción idónea para salir adelante, con la firme convicción de que sí hay un camino, una vía al progreso.
Capriles Radonski, de 40 años de edad, es un hombre sencillo, luchador por sus ideales, que no se detiene a la hora de compartir con su gentilicio, y de recibir de ellos diferentes muestras de cariño.
Es abogado de profesión y ha desempeñado los cargos de Vicepresidente del Congreso, Alcalde de Baruta y Gobernador de Miranda.
Fotos: Andrés Bello