“Chávez se murió y ahora no respetan al pueblo, nos atropellan como les da la gana” expresó Juana Alvarado, indignada. Hacía referencia a la orden de desalojo que tiene por no haber estado en su apartamento en el Complejo Habitacional Alí Primera, cuando el pasado sábado en la mañana, el equipo del Ministerio del Poder Popular Hábitat y Vivienda (Minhvi) le tocó la puerta.
Hace dos años le entregaron la vivienda, ni ella ni ninguno de los asignados en los más de 4 mil apartamentos tiene título de propiedad. Aquella vez, los llamaron, les dieron una llave y le dijeron “eso es suyo”.
Ahora, esa frase que para ellos significó “el milagro de la revolución” liderada por el fallecido presidente Hugo Chávez, fue cambiada por la de “saque todas sus cosas”, “no me interesan sus problemas personales”, “tiene 48 horas o haremos desalojo forzoso”.
Indira Arsolai también se siente atropellada. Antes de tener su vivienda en Alí Primera, vivía en el módulo de la Guardia Nacional en El Jayo con sus hijos, incluso antes de que le permitieran instalarse en el apartamento, la necesidad la obligó a estar dos semanas escondida, para que nadie se enterara de que ya dormía allí. “Yo de verdad tenía la necesidad y ahora nos quieren quitar el techo y la tranquilidad que desde entonces hemos tenido”.
Admitió que realmente hay quienes no habitan en las viviendas, quienes las “engordan” y las alquilan, todos saben que eso está prohibido porque el proyecto es una solución habitacional para quienes estaban en condición de calle o de hacinamiento.
Por ejemplo, según el testimonio de varios vecinos, la Zona 23 es catalogada como la de los “enchufados”, supuestamente la mayoría son personas de poder, hombres solos o parejas en apartamentos para tres.
Pero este no es el caso de todos. Consideran que la medida general que tomó el Ministerio sin haber hecho investigaciones precisas, ha sido una burla contra el pueblo, calculan que son más de 200 familias afectadas.
Estas personas dijeron que están siendo tratados como invasores o como cuidadores, “un día nos dan la casa y al otro nos la quitan, por eso era necesario que nos dieran los títulos de propiedad, aquí dejan en evidencia que no somos dueños de nada” opinó María Herrera.
Citados al Minhvi
Decenas de afectados se concentraron ayer en la sede del Minhvi, en la avenida Venezuela con 33, y una comisión conformada por cinco personas y encabezada por Carlos Sieveres, líder del Grupo Frío, fue designada para conversar con el ingeniero Víctor Carmona, quien desde enero dirige ese despacho.
También estaban los motorizados, que hacían sonar las motos a manera de apoyo al grupo afectado. El ambiente estaba tenso, una comisión de la Guardia Nacional Bolivariana llegó para poner orden, cerraron el organismo mientras se llevaba a cabo la reunión.
Mientras tanto, el ambiente en el urbanismo Alí Primera es angustioso debido a este intento de desalojo masivo, los beneficiados en la Gran Misión Vivienda Venezuela temen quedarse en la calle.
Apoyan el desalojo
Otro grupo de personas que estaba afuera del Ministerio, manifestó apoyar los desalojos de los apartamentos desocupados, para que sean reasignados a personas que realmente lo necesiten.
Erika Carrasquel, de la organización de madres con hijos especiales y personas con discapacidad, aseguró que ellos llevan años en la lucha por obtener una vivienda digna, mientras le entristece ver que existen personas que se lucran con el alquiler de esos apartamentos o los usan para pasar el fin de semana. Andrea Gudiño, subdirectora del Movimiento Patria Nueva, manifestó no permitir ni perdonar que existiendo tanta necesidad, una gran parte de las viviendas de Alí Primera estén abandonadas.