A las 9:00 a.m. de ayer Liliabeth Gil recibió una llamada telefónica. Era un conocido del mayor de sus tres hijos, quien le dijo que lo habrían localizado sin vida en la parte de atrás del Centro Comercial Cabudare, el cual está abandonado desde hace algún tiempo, en la urbanización Las Mercedes, de Palavecino.
La mujer, apurada y en compañía de su familia, se movilizó hacia el lugar. No sabía qué pudo haber sucedido y al llegar observó que Heberth Yunior Ramírez Gil, de 27 años, estaba tendido en el piso boca arriba, y ensangrentado.
Gil comenta que su hijo se ganaba la vida como obrero, se encargaba de abrir los huecos en el cementerio de Cabudare, oficio que aprendió de su padre, con quien trabajaba todos los días.
“Todo lo que hacía era trabajar para darme a mí y a sus dos hijos, de 6 y 4 años”, comenta la madre. Sobre lo ocurrido no tienen muchos detalles, pero la última vez que Ramírez Gil fue visto con vida por su madre fue a las 7:00 de la noche de este lunes, cuando estaba sentado en la entrada de Cabudare, precisamente por donde están varios negocios de comida rápida. La señora le pidió que se fueran a la casa, pero él le argumentó que estaba con unos amigos, que iría más tarde.
Le volvió a repetir que él llegaría más tarde, pero jamás lo hizo.
Ramírez Gil vestía la misma ropa con que fue visto el lunes. Estaba sobre un charco de sangre, ambas manos las tenía apretadas. La izquierda estaba llena de sangre. La causa de muerte fue: un disparo en la región escapular derecha. La madre asegura que la víctima nunca había tenido problemas con nadie. Residía en el sector La Montañita, de Cabudare, municipio Palavecino.
Al lugar solo llegaron los familiares, quienes lloraban la pérdida. Uno de los cuidadores del centro comercial que no quiso identificarse comentó que por lo desolado de la zona, oscuro además, el lugar es usado por muchas personas para consumir droga, a toda hora; otros lo usan para tener relaciones.
Indican que hasta violaciones se han registrado en esos espacios que durante muchos años han estado abandonados.
Funcionarios del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), acudieron al lugar e iniciaron las averiguaciones del caso.
Hasta ahora no descartan móvil alguno pero manejan la venganza como el principal.
