Se preparó para robar, pero fue sorprendido instantes antes de lograr el cometido, ayer, pasadas las 2 de la tarde. Como si reprodujera una escena creada por un cineasta especialista en el género de acción hollywoodense, un adolescente de 15 años se vistió con camisa manga larga blanca, corbata, guantes negros, una máscara de carabela, entró a la sede del Banco Mercantil de la avenida Lara y anunció el propósito de su visita: “Esto es un atraco”.
Caminó directo a una de las taquillas y pidió el dinero en efectivo amenazando con una pistola 380 cargada con ocho cartuchos. Al ser obedecida la orden por el cajero, no hubo necesidad de accionar el arma y se encaminó hacia la salida con cuatro paquetes de billetes de cincuenta bolívares.
Antes de cruzar la puerta fue sorprendido por funcionarios del cuadrante de motorizados de la policía regional asignados para la vigilancia de esa entidad bancaria.
Posiblemente, fuera del establecimiento un cómplice esperaba al joven, pero los policías no pudieron verificar esta hipótesis.
Dentro del banco estaban unas 50 personas y algunas distraídas con un señor sentado en el suelo con aparentes convulsiones, según el relato de una cliente que apenas se percató del ingreso de joven, no dudó en salir apresurada del lugar.
En la revisión hecha por los oficiales en la comandancia de Fundalara, donde fue trasladado el joven después del atraco frustrado, le decomisaron el arma de fuego, las municiones, el dinero, un morral y la máscara que usó para evitar ser reconocido.
Por ser menor de edad, ayer al finalizar la recolección de evidencias, fue enviado al Centro Socioeducativo Pablo Herrera Campins, conocido como El Manzano. Su caso fue encomendado a la fiscal 18 del Ministerio Público, Lorena Ceballos.
