Un grupo de trabajadores de las ocho escuelas larenses del movimiento de educación popular, Fe y Alegría, se postró en las inmediaciones de la Zona Educativa para exigir el pago de las deudas que mantiene el Ministerio de Educación con los casi 13.000 trabajadores que hacen vida en las distintas instituciones a nivel nacional.
Aunque la problemática se viene presentando desde hace más de cien días, decidieron manifestarse a estas alturas, según comentan, para “no entorpecer el calendario académico” de los infantes.
“De nada sirve que el Gobierno anuncie aumentos salariales si al final no llegan. Siempre nos piden paciencia pero apenas la semana pasada nos cancelaron retroactivos de marzo”, comentó Leiby Romero, docente en la U.E. Fe y Alegría Monseñor Romero ubicada en El Trompillo.
Reprocharon que siguen percibiendo bono de alimentación de Bs. 13.275, el sueldo base en Bs. 11.578 y se les niega otros beneficios que por contrato colectivo les corresponde.
“Así como nosotros cumplimos con nuestros niños, pedimos que el pago sea a la par de nuestro trabajo (…) La situación está muy difícil como para esperar tanto”, dijo. Cabe destacar dentro de los programas Fe y Alegría se encuentra el Instituto Universitario Jesús Obrero (Iujo), en donde se imparte educación inicial, contaduría, informática y entre otras carreras.
Crisis del país ha golpeado la educación
Los profesores explicaron que la situación país ha afectado considerablemente el desarrollo oportuno de las actividades escolares.
“En la mañana, cuando estamos con el himno, niños se nos han desmayado. Ya no se ve la arepita de todos los días”, comento la auxiliar de preescolar Linda Pérez, quien aseguró que por lo general los estudiantes dejan de asistir jueves y viernes porque se van con sus madres a hacer colas para comprar comida.
Señalan que han tenido que reducir los implementos de trabajo en más de un cincuenta por ciento. “Pedimos lo indispensable porque los padres no tienen con qué adquirir los útiles”.
Agregaron que para el próximo viernes a las 8:00 de la mañana se concentrarán frente a la Catedral de Barquisimeto para seguir con las exigencias.