Este miércoles varias personas cansadas de esperar atención en el Hospital Juan Daza Pereira del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, para la convalidación de los reposos, decidieron llamar a los representantes de los medios de comunicación social para hacer saber el vía crucis que deben pasar.
Aunque el personal de seguridad del Hospital, también conocido como el Seguro de la 50, trató de impedir el trabajo periodístico del equipo del diario EL IMPULSO, la denuncia se hizo efectiva.
«Hay un peloteo y nos tratan mal, tenemos que estar desde la madrugada haciendo cola, pero ni así logramos estar entre los 10 primeros, que son los únicos que atienden», denunciaron.
El problema, según manifestaron los presentes es mayor para quienes requieren ser vistos en el servicio de traumatología, porque o están en pabellón, en reuniones, o los de la tarde no quieren atender a los pacientes de la mañana.
«Ya no tengo más plata para seguir gastando en los pasajes hasta aqui», señaló Doris Juárez.
Por su parte, Rafael Antonio Martínez, indicó que tiene varios días madrugando, sin embargo no lo han atendido y su reposo ya vence hoy.
«Es demasiada ineficiencia, no es posible que tengamos que llamar a los periodistas para que nos traten. Esto pasa aquí todos los días y no es justo para el pueblo», dijeron indignados los afectados.
Inseguridad
No es sólo el hecho de madrugar para poder tener un número que garantice la atención, sino la inseguridad que se vive en la zona a toda hora, mucho más cuando la oscuridad es cómplice de los malhechores.
Han atracado a las personas cuando llegan, y también se han robado vehículos en las adyacencias del centro de salud debido a la poca o ninguna seguridad en la zona, a pesar de las colas que se observan tanto para convalidar reposos como para retirar los medicamentos de alto costo que también entregan en este recinto.
“No es sólo eso, sino que estamos a la intemperie, y en estos días lluviosos en vez de recuperarnos de nuestra enfermedad nos volvemos a resfriar. ¿No es posible?”, se preguntó una de las afectadas.
Justos por pecadores
Debido a las personas abusadoras que han tratado de convalidar reposos falsos, e incluso, por la denuncia que hubo en el Hospital Pastor Oropeza sobre la falsificación de los documentos de incapacidad, ahora están pagando justos por pecadores.
De esa manera se expresaron los afectados, porque a pesar de estar recién operados, sin poder caminar y en convalescencia, no aceptan la presencia de un familiar para la convalidación del reposo.
“Yo estoy operado de 5 hernías en el Hospital Central Antonio María Pineda, y sin embargo he perdido una semana viniendo a convalidar el reposo y aún no he tenido la suerte, si a eso se le puede llamar suerte”, dijo Filiberto González.
Sin versión oficial
Aunque se intentó hablar con la directora para conocer la versión oficial del caso, el personal de seguridad impidió el acceso al centro de salud y el jefe del área sólo dijo que ya todo estaba solventado.
Sin embargo, los afectados reiteraron que aunque les solucionaron a ellos por haber amenazado con llamar a los medios, son muchas las personas que a diario viven este vía crucis
Fotos: Ángel Zambrano