Efectivos de la Policía de Lara y de la Guardia Nacional Bolivariana les seguían el rastro a unos delincuentes que robaron un vehículo Chery QQ y se desplazaban por la zona oeste de Barquisimeto. Eran las 9:30 de la mañana cuando los localizaron en la calle 60 con carrera 17 de Barquisimeto, les dieron la voz de alto pero no se detuvieron.
Inició una persecución por los alrededores de la Uptaeb –antiguo Básico- y en la avenida Los Horcones, frente a la universidad, los sujetos dispararon desde el vehículo hacia las comisiones, un funcionario de la Policía de Lara resultó herido en la pantorrilla, los efectivos lograron detener la marcha del vehículo, los cuatro hombres fuertemente armados descendieron y continuó otra ráfaga de tiros.
Uno de los proyectiles afectó a un joven que se acababa de bajar de una unidad de transporte público. Luisaid Hernández (21) sintió la herida en su espalda, pero corrió hacia su casa –a 150 metros- en la carrera 1 con calle 1 y 2 de Pueblo Nuevo, para refugiarse.
Los otros tres delincuentes lo sometieron cuando abría la puerta y entraron hasta el fondo de la casa para ocultarse de las autoridades.
Pero la comisión se percató y logró rescatar al joven y a su abuela, mientras que los hombres, desde adentro, amenazaban con accionar las armas de fuego.
Alarma por explosivo en el Pastor Oropeza
A la emergencia del Seguro Social Pastor Oropeza fue ingresado el joven Luisaid, luego fue llevado el uniformado herido e instantes después el delincuente.
Los pacientes y acompañantes se alarmaron al ver aquel despliegue policial, pero la situación empeoró cuando un funcionario salió del área de emergencia con una granada fragmentaria en la mano y gritaba para que todos se alejaran del lugar.
Los médicos encontraron el artefacto explosivo en el bolsillo del antisocial que fue ingresado sin signos vitales.
“Todos corrimos hacia la calle, no entendíamos lo que pasaba, fue un susto muy grande” relató un testigo.
Los efectivos llamaron a expertos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) para que retiraran el explosivo, mientras tanto médicos, enfermeras y pacientes aguardaban a varios metros de distancia.
Luego de una tensa hora, las comisiones se retiraron y el paso hacia el centro de salud fue abierto.
Mientras tanto en Pueblo Nuevo
En aquella casa azul de rejas blancas, continuaba la “conversación” entre delincuentes y policías, los sujetos se negaban a entregarse y persistían las amenazas.
Un grupo del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas llegó al sitio, los vecinos que rodeaban el lugar estaban expectantes, repentinamente sonaron varias detonaciones. Se supo que cuando los agentes intentaron ingresar a la vivienda, los delincuentes dispararon y hubo un intercambio de tiros.
Los tres hombres resultaron gravemente heridos, fueron sacados de la casa y montados en una camioneta Pick Up para el traslado al centro de salud.
Inminente final
En el Seguro Social Pastor Oropeza estaba la hermana de uno de los antisociales, al escuchar la sirena de las patrullas se acercó para intentar ver a los heridos, pero fue empujada por uno de los efectivos que le ordenó que se retirara del lugar.
Gritaba y lloraba mientras los hombres eran ingresados a la sala de emergencia. “Mi hermanito, me lo mataron, no puede ser mi hermano” repetía.
Vio llegar a su hermano bañado en sangre y temió lo peor, luego de varios minutos se concretó el inminente final: estos tres hombres también fallecieron.
Grupo peligroso
Todavía se desconoce la identidad de los antisociales pero se supo que presuntamente integran un grupo delictivo denominado “Los Orientales” dedicados al robo de carros, secuestro y extorsión.
Varias armas de fuego que portaban los antisociales fueron retenidas por el Cicpc.
