A las seis de la mañana de este miércoles, habitantes de Santa Cecilia y urbanizaciones vecinas, se concentraron en la Avenida Ribereña para efectuar una concentración en protesta por los secuestros registrados.
Con pancartas alusivas al repudio de esta actividad delictiva, pitos, matracas, pabellones tricolores y enérgica voluntad, los manifestantes marcharon por este corredor vial hasta el Distribuidor Tarabana, ubicado en la parroquia Cabudare.
Pese al gran congestionamiento que se formó a partir de las siete de la mañana, las cornetas de los vehículos se dejaban escuchar en apoyo de la concentración.
No hubo quema de cauchos, ni agresiones salvo uno que otro conductor ofuscado por las largas colas provenientes del Distribuidor Valle Hondo y Redoma de Agua Viva.
Sentados en el pavimento elevaron plegarias por un joven ingeniero ultimado y la vecina herida.
Rezaron el Santo Rosario y entonaron las notas del Himno Nacional, de espaldas a la recién colocada carpa del Dibise.
¡Queremos solución!
Alis Bastidas, vecina de Santa Cecilia, declaró que decidieron tomar el referido distribuidor debido a la cantidad de hechos delictivos impunes.
-Aquí ha habido 32 secuestros denunciados. Ya hay un fallecido y una vecina herida de bala imposibilitada de caminar, narró Bastidas entre gritos de rechazo a la inseguridad.
Comentó que pasar por el distribuidor, le causa pánico a la gente que conoce los casos, razón por la cual “hoy elevamos nuestras voces para exigir de los organismos competentes respuestas efectivas”.
¡Queremos solución! repitió Bastidas, al tiempo que observó que de los 32 secuestros perpetrados en la zona, “no hay ni un detenido a pesar de existir la fotografía de uno de los secuestradores y la utilización del mismo modus operandi desde julio de 2011”.
Tranca total de la Ribereña
Asimismo, Verónica Gómez, una de las líderes de la protesta pacífica, comunicó que la acción, legalmente establecida en la Constitución Nacional, se ejecutó para dar a conocer “nuestro sentimiento, el dolor y la preocupación”.
-En este distribuidor van más de 30 secuestros exprés, una muerte y una persona herida de consideración, remarcó.
Solicitó, tanto al Cicpc como a la Guardia Nacional, así como a la Policía de Lara, la activación inmediata de un operativo de inteligencia que permita capturar a la banda de secuestradores que opera a sus anchas en ese sector y que mantiene en jaque a los palavecinenses.
Pidió a la Alcaldía de Palavecino realice la poda de los árboles del lugar, así como el desmalezamiento y alumbrado, “porque estamos cansados de llevar cartas sin respuestas”.
Dijo que si en un plazo prudencial no se aplicaban las medidas exigidas y no habían detenciones, se convocaría a todos los urbanismos de la Ribereña para efectuar una tranca total.
Indicó que les causa mucha suspicacia, que a menos de 150 metros de un módulo de la Policía de Lara, se registraran dos secuestros, con disparos múltiples y “nadie vio nada”.
No creyeron en promesas
Por su parte, Zaida Méndez, comentó que una noche antes de la convocada protesta en rechazo a los 32 secuestros registrados en el Distribuidor Tarabana e Intersección de la prolongación de la Avenida Libertador con Avenida El Placer, una comisión del Dispositivo Bicentenario de Seguridad (Dibise), se presentó en la Urbanización Santa Cecilia para persuadir a los líderes de la protesta a fin de no efectuar la tranca.
El comandante de la unidad castrense conversó con algunos vecinos y les prometió instalar una carpa en esa intersección, más patrullaje permanente, “con la deshonrosa condición de no realizar la protesta”.
Mas esta no es la solución, dijo Méndez con tristeza, porque ya ocurrió que apenas levantaron el campamento, ocurrieron dos secuestros con el triste y amargo resultado de una vecina herida de bala.
