La decisión del alcalde del municipio Andrés Eloy Blanco, Alfredo Orozco, de asumir, conjuntamernte con el Sundde, la distribución de productos regulados, pese a la oposición de los comerciantes y de las comunidades, ha traído como consecuencia el agravamiento del desabastecimiento en Sanare y sus alrededores.
El concejal Darío Zambrano informó que, debido a esa posición, las empresas encargadas de suministrar los artículos de la cesta alimentaria han dejado de hacerlo, lo que incrementa las fallas.
Como se ha informado, en varias oportunidades, representantes de comunidades y la Asociación de Comerciantes, a través de su presidente, Félix Saavedra, han protestado la medida impuesta por el gobierno de encargar exclusivamente a la alcaldía y el Sundde la venta de alimentos subsidiados.
Incluso, algunos comerciantes se han resistido a entregar a la alcaldía los despachos recibidos, lo que les ha traído amenazas de detenciones e incautación de los mismos.
La última protesta contra el CLAP ocurrió el lunes, y el jueves, en el salón de sesiones del ayuntamiento, se celebró una asamblea desde las 2 hasta las 8 y media de la noche, en la que el alcalde Orozco, con apoyo de allegados y partidarios del oficialismo, reafirmó su posición, mientras representantes de las comunidades insistieron en su rechazo.
Explicó Zambrano que en la noche se acordó integrar una comisión de la que estuvo excluido el sector comercio, la que se reunirá nuevamentre el martes para buscarle una solución al problema.
“Aquí lo importante es que las bodegas o automercados vuelvan a recibir los alimentos para distribuírselos directamente a las comunidades, sin intervención de la alcaldía y los CLAP, porque hasta ahora lo único que se ha visto con esos organismos son irregularidades y el pueblo sanareño pasando hambre”, afirmó el edil.
Mientras tanto, Sanare sigue prácticamente militarizado para evitar nuevas manifestaciones de protesta a los CLAP.