Como los textos que explican formas y bosquejan rutas para sobreponerse a los quebrantos espirituales, se instaló en la Sala Alternativa de EL IMPULSO “Canto a la esperanza”, un evento organizado por el movimiento ciudadano Esperanza Activa.
En lugar de palabras escritas, durante la actividad se inyectó en forma de tertulia la necesaria dosis anímica para enfrentar el camino espinoso por el que ahora transitan los venezolanos.
Para asumir esta tarea se sentaron frente al público que copó el salón, el médico Fabio Adami, la abogada Nelly Cuenca, la economista Liliana Ferreira y la actriz Nancy Machado para exponer sus ideas, guiados por la periodista Yayet Peralta y el artista plástico Jesús Pernalete Túa como moderadores.
Precedidos por la música de la agrupación barquisimetana Blaos, cada uno desde sus oficios y experiencias, desgranó maneras para “no dejarse dominar por la desesperanza”, como definió Pernalete Túa el objetivo de la actividad.
A Ferreira, por ejemplo, le correspondió ahondar en uno de los temas de mayor gravedad para los ciudadanos barquisimetanos y de la nación entera: la economía. Como especialista en esta área, su propuesta fue explorar alternativas de emprendimiento y, a partir de esto, convertirse en seres productivos.
“La idea es aprovechar la crisis al máximo. Tratar de pensar de forma diferente en lo que es el emprendimiento. El uso de áreas diferentes”, explicó.
Hacer florecer cualquier proyecto, debe haber un esfuerzo perseverante, recomendó. “No nos podemos paralizar ante la ausencia de ese apoyo institucional, tenemos que crearlo y las redes sociales, las conexiones que podamos hacer entre los ciudadanos, son incluso más fuerte que cualquier otra institución porque es la madre de todas las instituciones”.
Como la economista, Cuenca está convencida de que “la adversidad saca lo mejor de cada ser humano”, antes de emprender hay que confiar en lo que se hace y el impacto futuro, como el que ella y su equipo tuvieron cuando hace 15 años fundaron el Centro de Resolución Pacífica de Conflictos.
Para dar una prueba de que las transformaciones para bien son posibles, relató su propio testimonio. Antes de difundir mensajes positivos, recordó la conducta conflictiva que la caracterizaba cuando se desempeñaba como síndico del municipio Iribarren.
Al decidir tomar otro rumbo también se propuso ayudar a otros a hacerlo. Así surgió la institución que hoy integra, donde se enseña en cursos y talleres a resolver conflictos a partir de la negociación y la mediación, recursos de los cuales ahora tiene sed el país, dijo.
Por su lado, la actriz, cuentista y cantante, Nancy Machado, aportó su visión optimista desde el mar donde se desenvuelve. Cómo vivir a través del arte, cómo aportar herramientas a la gente para resurgir, cómo mantenerse trabajando sin dejarse turbar por las adversidades y cómo hacer crecer el talento local, fueron algunas de las claves desglosadas por la intérprete.
Autoconocerse y “declarar una palabra buena a diario”, es para Machado el punto de partida para encaminarse hacia un estilo de vida positivo. Sacudir las quejas, añadió, es otro paso importante si se quiere sumar al progreso del estado y de Venezuela porque “enfermos y tristes no le servimos a nadie”, reflexionó.
Se trata, completó, de “identificarse con el propósito de vida y desde ese diseño de Dios, para cada uno de nosotros aportarle al país, que tiene que entrar en reconstrucción de la mano de todos”.
Luces como las compartidas anoche en la Sala Alternativa, se espera que sean de amplio alcance, según lo anunció Pernalete Túa.
El movimiento ciudadano Esperanza Activa estima poder hacer repetir el encuentro de ayer en una serie con diversos invitados motivados por el mismo tema e, incluso, convertirlo en un programa de televisión y hacer de este “ejercicio de prospectiva”, como lo describió el artista plástico, un eco capaz de nutrir a todos los larenses y todo el territorio nacional, si es posible.