Una tubería de 36 pulgadas y un tanque con capacidad para almacenar 2.000.000 de litros de agua, hoy es la alegría de 15 mil habitantes del norte del municipio Iribarren. Caminos subterráneos se abrieron con esmero para cumplir una promesa: proveer de agua potable dulce a comunidades que durante 20 años vieron grifos secos.
En el año 1999, la parroquia Unión acogía 168.473 habitantes y para el 2010, ya era el hogar de 213.360 personas.
En tanto, el tabulador del Instituto Nacional de Estadística de Venezuela, descubre un conteo poblacional de la parroquia El Cují para 1999 de 37.682 habitantes; para 2015 hay una proyección de 132.369.
El proyecto de la Matriz Norte, se destacó entre muchas propuestas planteadas con miras a impulsar el desarrollo del sistema de distribución del vital líquido en la ciudad.
Es la alternativa para hacerle frente a los cambios demográficos; es una meta alcanzada para líderes vecinales, quienes perseveraron en exigir la resolución del problema de suministro; es el proyecto de mayor exigencia, en términos hidráulicos y de ingeniería, ejecutado en la periferia regional, con una inversión hasta la fecha de 116.500.000 bolívares.
Antes y después
Brisas del Norte I y II; Brisas de El Trompillo; Colinas de El Trompillo; José Cruces I, II y III; Alí Primera; Valle Alí Primera; Joel Sequera y todos los sectores de la comunidad Jacinto Lara (Los Sin Techos), eran asistidos por la alcaldía de Iribarren a través del servicio de camiones cisternas que recargan en la estación San Juan, surtida por dos fuentes: el embalse Dos Cerritos y de pozos.
“Ahora, el servicio básico de distribución de agua potable hacia estos sectores se hace a través de tuberías y el agua es dulce porque viene de Dos Cerritos. El líquido que proviene de pozos es diferente, es potable pero las comunidades dicen que es salada.
Hay muchos sectores que se benefician de agua de pozos. Por ejemplo, Palavecino es uno de los municipios cuya única fuente de suministro viene de campos de pozos.
En Barquisimeto, toda la zona Este, se beneficia de agua potable que viene del campo de pozo El Vidrio y El Carabalí”, explicó en primera instancia Adriana Díaz, presidenta de la Hidrológica de Lara.
Una promesa, es un compromiso
El martes 20 de septiembre del 2011, la plana A1 del diario EL IMPULSO, suscribe: “Quedó inaugurada primera etapa de Matriz Norte”. Para el momento, el gobernador de Lara señaló que el proyecto se ejecutaría en cuatro etapas para finalmente beneficiar a 300 mil habitantes de la parroquia Unión, El Cují y Tamaca.
Justo un año después, 1.700 tomas están instaladas y la máxima autoridad de la región anunció la culminación de la Estación de Rebombeo El Trompillo (Segunda y tercera etapa del proyecto)
“La obra se inició en la gestión del exgobernador de Lara, cuando colocaron aproximadamente 4 kilómetros de tubería de 36 pulgadas. Sin embargo, Henri Falcón, actual gobernador, tenía una visión de crecimiento hacia la zona norte, que hoy se ve prácticamente cristalizada. En total, son 2.700 tomas a residencias; de esa cantidad, sólo nos quedan 1.000 por instalar. El gobernador prometió la culminación de ese trabajo para el 15 de octubre, quien hace un año hizo una promesa y cumplió”, agregó Díaz.
Detalles técnicos
¿De dónde viene el vital líquido?, del sistema de distribución del embalse Dos Cerritos en El Tocuyo. De la aducción o extracción que viene de esa fuente principal, los ingenieros hicieron un empalme en el distribuidor San Francisco que va a recorrer la Circunvalación Norte hasta el Polígono de Tiro.
“Son 17.11 kilómetros que comprende el proyecto, de los cuales Hidrolara ha construido 13 y medio, distancia que nos permite llegar hasta El Trompillo para beneficiar a las comunidades”, dijo Pedro Sánchez, gerente de Obras.
Por su parte, Adriana Díaz, aclaró: “No se le está quitando agua a otros sectores para atender a estas comunidades. Lo que hicimos fue instalar unas válvulas, que están incorporada a el sistema de suministro que nos permite simplemente una distribución más eficiente y equitativa.
En el 2013, vamos a aumentar la producción, deseando que Corpolara termine los 3.6 kilómetros que les toca, culminar la cuarta etapa y finalmente poder surtir a El Cují y Tamaca. Se hará una inversión para recuperar 300 litros de agua por segundo y garantizar el servicio a estos sectores. Por ahora, no es posible llegar hasta esas parroquias y los mismos habitantes lo saben.
Nosotros en ocho meses colocamos casi 9 kilómetros de tubería y Corpolara en un año no ha podido cumplir con lo suyo”.
La recompensa: Una comunidad atendida
El éxito, por la planificación y ejecución de un proyecto de gran impacto social, amonesta a la improvisación que tienta a la mayoría de los servidores públicos.
Para el cuerpo de ingenieros, operadores, y personal involucrado en los trabajos del macrosector El Trompillo, no hay mayor satisfacción que el gozo espontáneo de los habitantes del lugar.
“Como hidrológica, la mayor satisfacción es la interacción con la comunidad. Ver las expresiones y gestos de alegría el miércoles (19-09), fue muy gratificante.
Pero no sólo ayer, sino durante las pruebas y todo lo que implicó el logro del esta fase del proyecto, porque la Matriz Norte no es sólo instalar tubos.
Hay un trabajo en equipo detrás de todo, conformado por proyectistas, electromecánicos e inspectores de obra.
Sin embargo, los mejores supervisores, son los mismos residentes de las comunidades, quienes durante todo este tiempo han estado protegiéndonos y cuidando la misma obra. Nunca pensamos si era o no una zona peligrosa, nunca tuvimos algún inconveniente”, aseguró Díaz.
Proyecciones para el 2013
Invertir 18.000.000 de bolívares abre la lista de planes a cumplir. La presidenta de Hidrolara señaló que hay familias, no contadas en el censo del 2009, ya asistidas en esta III etapa, el resto de los sectores consolidados, serán incorporados para el año que viene.
“Haremos la construcción de Tanque alimentadores; mejoras y ampliación del sistema de Carorita y la consolidación del sistema Jayo”, agregó.
En este sentido, con la inauguración del macrosector El Trompillo, la lucha de 20 años de los líderes vecinales ha sido premiada. Garantizar el buen funcionamiento de los servicios públicos, es un asunto impostergable; es derecho del ciudadano, es deber del administrador público.
Asimismo, cuando por el túnel trasvase del Sistema Hidráulico Yacambú-Quíbor por fin corran ríos de agua dulce, aseguró que la calidad de vida de quienes viven bajo cielos color naranja será óptima.
Fotos: Archivo