El presidente de la Subcomisión de Medios de Comunicación de la Asamblea Nacional, diputado Biagio Pilieri, rechazó que de manera arbitraria fueron cerradas dos emisoras de radio “de una manera abusiva y por medio de Conatel apagaron sus equipos Sorte 105.7 FM, Exitosa 106.9 FM; ambas del estado Yaracuy y Barinesa 9.7 FM, ubicada en Barinitas, el procedimiento como ya lo hemos visto en reiteradas oportunidades ha estado cargado de vicios y excusas como que no tienen el permiso al día, pero como lo pueden tener si la institución encargada de los permisos, Conatel no da respuestas para tratar de mantener una espada en el cuello de cada emisora del país, para descartarlas en el momento que sean incomodas para el gobierno”.
Recordó que Barinesa y Sorte tienen más de 23 años al aire, con una programación continua y equilibrada, que hasta el momento de apagar su transmisión cumplió con el ABC de la comunicación; informar, entretener y educar.
“No hay motivo para que las hayan cerrado. De la misma manera exhortamos al oficialismo para que haga presencia en las reuniones a las que estamos llevando a cabo, comprendemos que siguen ordenes y deben actuar de manera rebelde, pero no permitiremos que se le siga dando la espalda al pueblo”, sentenció.
El parlamentario Biagio Pilieri insistió en que desde la Comisión se continuará haciendo revisión exhaustiva para evaluar y verificar la situación en la que se encuentran no sólo las emisoras que además se están viendo afectadas por las programaciones clandestinas, sino “estaremos pendientes de los canales de televisión, a quienes pretenden censurar”.
Por su parte, Enza Carbone, presidenta de la Cámara Venezolana de la Radiodifusión exhortó a todas aquellas radios ilegales del país, para que apaguen sus transmisiones, porque tarde o temprano serán sancionadas por explotar ilegalmente el espectro radioeléctrico de nuestro país.
«Nosotros hemos venido denunciando la existencia de emisoras clandestinas, más de 1500 a lo largo y ancho de todo el país, pues la idea es simplemente regularizar esta situación.
Estas emisoras clandestinas no le están causando un perjuicio exclusivamente a las personas que trabajamos o prestamos el servicio de radiodifusión, están causando un perjuicio a la colectividad en general, porque estas emisoras clandestinas lo que generan es una interferencia la cual no permite a los ciudadanos escuchar la radio que quieren escuchar», explicó.