El diputado Filiberto Peña pedirá la próxima semana una moción de urgencia en el Consejo Legislativo para plantear el caso de la extracción de granzón y arena del cauce del río Turbio, lo que mantiene en peligro La Ribereña.
Recordó que la Comisión de Ambiente del parlamento regional, tierne a su cargo la elaboración de un informe sobre la situación, pero hasta ahora no lo ha hecho, y mientras tanto, continúa el saque de material del río sin control alguno por parte del ministerio del Ambiente, ahora llamado de Ecosocialismo y Aguas.
Para el parlamentario, la situación es grave porque, al ser desviada la corriente hacia el norte, se ha venido socavando la base de la avenida, encontrándose actualmente sólo a unos diez metros del borde del barranco.
“Y uno no sabe cuándo va a crecer el río porque el no nos avisará el día en que destrozará La Ribereña en ese tramo de Santo Domingo”, afirmó Peña Canelón.
Recordó que el tramo entre la avenida Uruguay y la 38, construido conjuntamente por la gobernación y el entonces ministerio de Transporte y Comunicaciones, costó 98 millones de bolívares, pero hoy serían 98 mil millones.
Enfatizó que, presumiblemente, quienes están explotando el cauce del río no tienen los correspondientes permisos del organismo encargado de otorgarlos pues el Consejo Legislativo los ha pedido y nunca los presentan, y el ministerio no hace nada al respecto.
“Están exponiendo La Ribereña a una inminente destrucción, por indolencia, incapacidad, negligencia o falta de autoridad”, enfatizó.
Dijo que la próxima semana insistirá ante sus colegas del CLEL, especialmente quienes integran la Comisión de Ambiente, para que se pronuncien ante una situación que tiene preocupada a toda la colectividad por lo que representaría la destrucción de una arteria vial tan importante como esa.
Como ya lo han hecho otros parlamentarios y concejales, el saque de granzón del Turbio lo llevan adelante unas personas netamente con fines de lucro, y lo que es más grave, sin ninguna técnica pues están desviando el río hacia el norte sin tomar en cuenta el riesgo que eso representa para la vía sureña de la ciudad.